Profesionales de la salud del estado Aragua protestaron para exigir mejores salarios y el reconocimiento de su antigüedad en los hospitales públicos.
La crisis en el sector ha llegado hasta el punto en el que doctores y enfermeras tienen que realizar ventas ambulantes en los pasillos de los hospitales para poder pagar el pasaje desde sus casas hasta los centros hospitalarios.
Esta situación ha llevado a que cerca de 1.400 enfermeras del hospital central de Maracay hayan dejado sus puestos de trabajo, en muchos casos para irse del país.
Además a los trabajadores de salud que llevan más de 20 años de servicio se les está desconociendo la antigüedad.
Con todas estas acciones el régimen sigue violando los derechos de los profesionales venezolanos que se ven obligados a realizar otras actividades o irse del país, agravando aún más la crisis humanitaria.