El rector principal del nuevo Consejo Nacional Electoral (CNE), Enrique Márquez, espera que luego de un diálogo político (entre oposición y régimen) podría resolverse las inhabilitaciones de los partidos venezolanos.
A su juicio, se trata de un «tema grueso» que está en manos del Tribunal Supremo de Justicia ilegítimo; por lo que, considera que el punto debería ser discutido en las negociaciones.
«No creo que los venezolanos podamos claudicar en nuestro afán por construir el país (…) No voy a colgar los guantes por mi país, no creo que sea lo lógico», indicó en una entrevista a Unión Radio.
Además de esto, agregó que el principal obstáculo que enfrena el Poder Electoral, designado por el régimen, es la credibilidad en los comicios venideros.
«Aquí se trata de que cada quien a lo que tiene que hacer, si el árbitro aplica la norma, a clase política tiene que ocuparse de convencer al pueblo de que vaya a votar», precisó.
También hizo hincapié en la auditoría del Registro Electoral para actualización de datos.
«La idea es abrir el CNE para que la comunidad pueda visualizar los detalles técnicos y generar confianza de que el sistema funciona», expuso.
En cuanto al «Acuerdo de Salvación Nacional» propuesto por el presidente encargado, Juan Guaidó, señaló que «no puede ser solo para acceder el poder, sino que tiene que haber un entendimiento que incluya a los venezolanos y la calidad de vida de la gente».
«No veo para Venezuela soluciones mágicas y rápidas, nos toca a todos transitar un camino que no es sencillo, esto es un proceso y la maduración como sociedad pasa por utilizar los elementos democráticos que tenemos», puntualizó.