Este lunes David Smolansky, Comisionado de la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos (OEA) denunció que 16 niños venezolanos entre ellos un bebé de 4 meses de edad, que habían llegado a Trinidad y Tobago fueron rechazados y deportados en botes precarios por las autoridades.
Smolansky detalló que estos niños fueron separaron de sus padres y enviados en botes con precarias condiciones.
Afirmó además que la embarcación fue enviada en medio de una tormenta, y presumen además que pudo haberse quedado sin combustible en altamar.
Por su parte la periodista venezolana Beatriz Adrián, resaltó que la deportación tuvo lugar en la zona de Peñeros “y en medio de una tormenta”.
Destacó además que se trata de niños de entre dos meses de edad y los 17 años. Uno de ellos con un padecimiento cardíaco.
Cabe destacar que con estas deportaciones, Trinidad, ignoró un recurso de habeas corpus introducido por la defensa de los menores. Según informó Smolansky, Trinidad y Tobago “ratificó la Convención Americana sobre Derechos Humanos y la Convención sobre Refugiados de 1951”, dos instrumentos que “protegen a migrantes y refugiados contra la devolución”.