Lo principal para los residentes de Florida es abastecerse de alimentos y agua potable mientras esperan la llegada del potente huracán Dorian, cuando aún no es claro por dónde tocará tierra durante este fin de semana largo con motivo del Día del Trabajo.
El presidente Donald Trump ha dicho que podría ser un «absoluto monstruo», en un video divulgado en su cuenta en Twitter en que ofrece indicaciones sobre la tormenta.
«Todo indica que va a golpear muy fuerte y que va a ser muy grande”, dijo Trump. Comparó a Dorian con el huracán Andrew, que arrasó el sur de Florida en 1992.
En la madrugada del viernes, el vórtice de Dorian estaba a unos 420 kilómetros (260 millas) al este de las Bahamas, con vientos de 165 km/h (105 mph) y se desplazaba en dirección noroeste a 19 km/h (12 mph).
Durante la noche, el gobierno de Bahamas emitió una alerta por huracán para el noroeste del país.
Se prevé que la tormenta categoría 2 siga creciendo hasta llegar a la potencialmente catastrófica categoría 4 con vientos de 209 kilómetros por hora (130 millas por hora), y toque tierra en Estados Unidos el lunes en alguna parte entre los Cayos de Florida y el sur de Georgia, una franja de 800 kilómetros (500 millas) que refleja el elevado nivel de incertidumbre en este momento, según indicó el Centro Nacional de Huracanes.
«Si toca tierra como un huracán categoría 3 o 4, eso es un gran problema”, dijo Brian McNoldy, investigador de huracanes de la Universidad de Miami. “Mucha gente se verá afectada. Va a haber muchas reclamaciones a las aseguradoras».
El presidente Donald Trump canceló su viaje del fin de semana a Polonia y declaró que Florida «va a estar totalmente lista».
En Florida se toman medidas desde esta semana, cuando fue declarada la emergencia. Gobiernos locales comenzaron a distribuir costales de arena, los consumidores se apresuraron a almacenar alimentos, madera para tapiar ventanas y otros suministros de emergencia, y los automovilistas se proveyeron de gasolina. Se reportó algo de escasez de combustible en el área de Cabo Cañaveral.
Con información de La Voz de América