Marco Rubio, senador por el estado de Florida, y Ron DeSantis, gobernador de esa misma región, reaccionaron, este jueves, a la supuesta orden que será emitida por la Casa Blanca, con la intención de prohibir las conexiones aéreas desde y hacia la entidad floridana.
De acuerdo con lo trascendido, el actual Ejecutivo estadounidense estaría considerando la medida, luego de que Florida reportara 340 casos de Covid-19, que fueron provocados por la cepa detectada, a finales del año pasado, en Reino Unido.
A través de una carta dirigida al presidente Joe Biden, Rubio, quien pertenece al Partido Republicano, consideró que la interrupción de los viajes sería una decisión “escandalosa y autoritaria que no tiene base legal ni científica”.
En su misiva, el legislador resaltó que una restricción de las conexiones aéreas “sólo serviría para infligir un gran y devastador dolor económico a una economía ya dañada”. La medida, manifestó el congresista, “privaría a las empresas de Florida de los dólares turísticos que tanto necesitan, mantendría a la familia y amigos aparte, y establecería un uso del poder sin precedentes”.
Por su parte, Ron DeSantis, quien habló sobre el tema durante un mitin celebrado Port Charlotte, expresó que el supuesto cierre aéreo por parte del Gobierno federal sería un ataque a su estado, por razones eminentemente políticas.
Por ese motivo, DeSantis aseguró que, de concretarse, la disposición presidencial sería una medida “inconstitucional, poco inteligente e injusta”.
El mandatario regional aprovechó para advertir que, desde su despacho, están listos para responder “muy rápidamente”, en caso de que cualquier autoridad pretenda dañar a los floridanos.