El Senado estadounidense confirmó el jueves a William Burns como jefe de la CIA.
Burns, de 64 años y uno de los diplomáticos más experimentados del país, obtuvo un amplio apoyo bipartidista.
Fue confirmado por el voto unánime de los senadores después de que el republicano Ted Cruz levantara la reserva que había hecho a la nominación en relación con el gasoducto de gas natural Nord Stream 2 de Rusia con Alemania.
Con el visto bueno de Burns para encabezar la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Biden completó su equipo de seguridad nacional de alto nivel.
La directora de Inteligencia Nacional, Avril Haines, elogió a Burns, exsubsecretario de Estado, como un «servidor público extraordinario» que se ha ganado el respeto dentro y fuera del gobierno por sus varias décadas de servicio de Estados Unidos, según afirmó.
Durante su audiencia de confirmación en el Senado, en enero, Burns aseguró que tenía un conocimiento profundo de la CIA, con la que ha trabajado habitualmente en su carrera.
Artífice del diálogo con Teherán que desembocó en el acuerdo nuclear internacional en 2015, consideró que Estados Unidos debería «hacer todo lo posible para evitar que Irán desarrolle un arma nuclear».
También dijo que la actitud «depredadora» del gobierno chino representaba el «mayor desafío geopolítico» para Estados Unidos.