La Senadora colombiana por el partido Centro Democrático, Paola Holguín, aseveró que si la fracción opositora de Venezuela incursiona en un nuevo proceso de dialogo con el régimen de Nicolás Maduro, estaría cometiendo el mismo error que su país al negociar con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y advirtió que la narco-dictadura no solo representa un peligro para Venezuela sino para todo el hemisferio sur de América.
Holguín espera que las relaciones entre Colombia y la nueva administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se mantengan intactas como lo han hecho durante los últimos 200 años y destaca que la agenda en común que ambos territorios poseen tiene base en: el refortalecimiento institucional, la cooperación para el desarrollo económico mutuo, la lucha con el narcotráfico, el medio ambiente. Y por último pero no menos importante: recuperar la democracia para Venezuela.
La senadora descarta que la ruta del dialogo sea la solución para la causa venezolana. Recuerda que los encuentros anteriores entre ambas fracciones políticas de ese país solo han servido para «oxigenar» a la dictadura en el poder. De ese mecanismo, opina que sería cometer el mismo error que Colombia suscitó al entrar en un proceso de negociaciones con las FARC. «Lo único que se consiguió fue entregarles por la vía política lo que no lograron por por la vía armada», comenta.
«En Venezuela la narco-dictadura ya logró su cometido que es controlar, acabar y gobernar ese pueblo. Yo me pregunto ¿qué se puede negociar? ¿creen que pueden negociar? ¿creen que hay algo para ofrecer a un gran cartel de narcotráfico enriquecido sin escrúpulos? Que acabo con la democracia, la instituciones, la clase empresarial, violo todas las garantías y convirtió a uno de los países mas prósperos de la región en un país donde la ciudadanía lamentablemente no tiene acceso ni siquiera a lo básico para sobrevivir».
Para la demócrata, el tema de Venezuela es un tema judicial que está relacionado con la seguridad hemisférica y que, contrario a lo que se piensa, la posición adversa al régimen de Maduro por parte de la comunidad internacional no es cuestión de ideologías, izquierdas o derechas. «Tenemos que ir por otras alternativas, está en riesgo la seguridad del hemisferio. Venezuela es un centro de operaciones terroristas, lo que hay son órdenes de captura por delitos internacionales contra ellos (chavismo)».
Ante su rechazo al dialogo explica que los políticos (venezolanos) tiene que la capacidad de dar a conocer lo que ocurre en Venezuela y es allí donde entra en juego el liderazgo y propone generar las circunstancias para lograr elecciones «libres y transparentes» en el país y exponer el riesgo que representa la narco-dictadura en el poder de Venezuela.
Por último, rindió detalles de sus aspiraciones presidenciales y comentó que realizó una gira por el Eje Cafetero para conversar y visitar las localidades. Pese que a que todavía no se ha establecido un cronograma o actividades para designar a los precandidatos del partido Centro Democrático, reafirmó su lucha contra el populismo y «los amigos del socialismo» cuyo objetivo es «dividir y sembrar odio hacia las empresas e instituciones». Con firmeza declara «es momento de una gran coalición».
Si quiere conocer más detalles de esta entrevista, aquí le dejamos el segmento completo: