Este jueves santo, los taiwaneses fueron sorprendidos por un fuerte sismo de 6,0 grados de magnitud que sacudió la nación, sintiéndose en los edificios más altos y causando interrupciones del tránsito, según reportes del Instituto Geológico de Estados Unidos (USGS).
En Taipei, capital de Taiwán, los rascacielos fueron sacudidos violentamente mientras algunos niños tuvieron que abandonar las aulas de clases en medio del pánico, según rezan en los primeros reportes.
Una carretera que conecta a Yilan y Hualien tuvo que clausurarse por los derrumbes originados por el movimiento telúrico, según reportes de la prensa local.
El evento ocurrió a las 13H01 pm (05H01 GMT) a una profundidad de 19 kilómetros en el este de Hualien. Hasta los momentos las autoridades no tienen reportes de víctimas.
Mientras tanto, la Agencia Meteorológica de Japón advirtió que las personas que viven cerca de la costa podrían notar algunos efectos sobre el nivel del mar, pero descartaron un tsunami.
“Debido a este terremoto, las áreas costeras de Japón pueden observar leves cambios en la superficie oceánica, pero no hay riego de daños”, dijo la agencia.