El Gobierno de Estados Unidos pidió, este viernes 28 de marzo, al Tribunal Supremo que le permita implementar la ley de Enemigos Extranjeros de 1789 para poder deportar a venezolanos sin el debido proceso, como lo hizo con los 200 migrantes enviados a una cárcel de máxima seguridad en El Salvador.
La administración de Trump presentó una solicitud de emergencia luego de que la corte federal de apelaciones mantuviera el bloqueo de uso de la ley dictado por el juez James Boasberg el pasado 15 de marzo.
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La administración de Trump argumenta que es un tema de seguridad nacional urgente y no puede ser resuelta en tribunales de menor instancia. El escrito del Gobierno señala que en la Constitución dice que la seguridad nacional recae sobre el presidente.