El gobierno de Chile oficializó, este lunes, la resolución que fue promulgada el pasado 18 de abril. Esa medida declara que “los pasaportes y cédulas venezolanas, expedidas desde el año 2013 y que estén vencidos, serán considerados como vigentes por un período de dos años”.
La decisión, que se fundamenta en Declaración de Quito sobre Movilidad Humana de Ciudadanos Venezolanos en la Región, le permitirá a los migrantes que escaparon de Venezuela, huyendo de la dictadura, y que ahora se encuentran en suelo chileno, “estampar la visa por primera vez, pedir prórroga de una Visa Temporaria y retirar el Certificado de Permanencia Definitiva”.