Celebridades como el comediante Chris Rock, la actriz Sarah Silverman o el actor Mark Ruffalo se han despojado de su ropa en una singular campaña.
El anuncio de servicio público (o PSA, por sus siglas en inglés) busca alertar a la ciudadanía sobre las denominadas “boletas denudas”.
Esa irregularidad se presenta cuando un votante, que ha sufragado por correo, olvida envolver la papeleta dentro de lo que se conoce como “the secrecy envelope” o “el envoltorio del secreto”.
Si la boleta llega “desnuda” al lugar en que debe ser contabilizada, el voto es anulado y, por ello, el elector pierde la posibilidad de escoger a cualquiera de los candidatos que compiten para llegar a la Casa Blanca, a la Cámara de Representantes o al Senado.
Para evitar perder el voto, los electores que sufraguen a distancia deben rellenar la papeleta, según lo indican las instrucciones. Una vez completado ese proceso, deben introducir la boleta en “el envoltorio secreto”.
Como último paso, el ciudadano debe colocar “the secrecy envelope” en un “declaration envelope” (“envoltorio de declaración”). Ese segundo y último sobre tiene impresos varios renglones que han de ser rellenados por el vontante. Al hacerlo, el elector manifiesta que el voto contenido en ambas envolturas representa su voluntad.