Una serie de tormentas ha provocado lluvias torrenciales, violentos vientos y relámpagos, inundaciones y deslizamientos de tierra a lo largo del Estado más poblado de Estados Unidos. Las autoridades locales mantenían la mañana de este martes la orden de evacuación de unas 50.000 personas en decenas de comunidades afectadas por seis fenómenos climáticos conocidos como ríos atmosféricos. Estos han dejado hasta el momento 17 fallecidos en varias partes de la entidad. Las autoridades, no obstante, han advertido que la cifra de víctimas puede subir en las próximas horas. Más de 160.000 personas también han sufrido de cortes al suministro.
Las víctimas más recientes se han registrado muy temprano este martes. Un par de personas chocaron en un auto en Tulare, un condado a medio camino entre Sacramento y Los Ángeles, en el centro del Estado. En ese mismo sitio se ha documentado la muerte de una persona víctima de un rayo. Desde diciembre, las tormentas ya han dejado más fallecidos que las dos últimas temporadas de incendios en California. “Nuestro mensaje es muy simple: manténganse muy vigilantes”, advirtió la noche del lunes el gobernador Gavin Newsom desde el centro de respuesta a la emergencia. Este martes, el político demócrata dedicó su mañana a recorrer Capitola, una ciudad de menos de 10.000 habitantes al este de Santa Cruz (norte del Estado), donde atestiguó los estragos que ha dejado el agua.
Horas más tarde, en una conferencia de prensa de Santa Cruz, Newsom advirtió que es posible que a lo largo de la tarde pueda subir el número de fallecidos. Los equipos de rescate en el condado de San Luis Obispo trabajaban esta mañana en la localización de Kyle Doan, un menor de cinco años que fue arrastrado el lunes por una corriente del desbordado río Salinas. El menor iba junto a su madre de vuelta al kínder hasta el que el auto se topó con una crecida. El agua lo arrebató de las manos de su madre, quien fue salvada por unos vecinos.
Este martes todos los ojos estaban puestos en Montecito, una comunidad costera junto a Santa Bárbara, que ha servido en los últimos años como el refugio favorito de los ricos y famosos. Allí estaban previstas para estas horas nuevas inundaciones y las autoridades habían pedido a los habitantes de la localidad evacuar hacia puntos más altos. La tormenta azota la zona justo cinco años después de que una serie de derrubios provocaran la muerte de 23 personas. “Es un recuerdo solemne de lo rápido que pueden cambiar las circunstancias”, afirmó Newsom en su mensaje.
La situación que vive Montecito ha sido trasladada al resto de California por una de sus vecinas más famosas. Ellen Degeneres, la famosa presentadora de televisión, compartió el lunes con sus 130 millones de seguidores en Instagram un video del bravo torrente que ha dejado la lluvia. “Por favor, protéjanse”, afirmó la conductora en la red social. Las comunidades costeras han sido algunas de las más castigadas, pues han recibido hasta 38 centímetros de lluvia en las últimas horas en las regiones de Los Ángeles, Santa Bárbara y Santa Clara. Por la noche, en la ceremonia de los Globos de Oro, se informó que uno de los ganadores de la noche, Kevin Coster, no había acudido a la gala porque estaba bajo refugio en Santa Bárbara.
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