Los audífonos podrán comprarse sin prescripción en Estados Unidos, dijeron este martes autoridades sanitarias, en un esfuerzo por reducir el gasto en estos dispositivos, que rondan los 5.000 dólares.
«Para muchos estadounidenses que sufren pérdida de audición, los audífonos seguros, efectivos y de buena calidad han sido inasequibles», dijo el secretario de salud, Xavier Becerra, a los periodistas.
La medida, que entrará en vigor en octubre, reducirá el costo de un par de audífonos en aproximadamente 2.800 dólares al eliminar el requisito de ver a un médico o audiólogo, declaró Brian Deese, director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca.
En la actualidad, para acceder a un par de audífonos hay que desembolsar unos 5.000 dólares en Estados Unidos, una cifra mucho mayor que la que se paga en otros países avanzados. En algunos como Gran Bretaña, incluso, estos aparatos son gratuitos.
Los niños, así como las personas con pérdida auditiva severa, seguirán necesitando una receta.
La nueva disposición «cumple mi compromiso de reducir los costos para las familias estadounidenses… brindando a las personas más opciones para mejorar su salud y bienestar», dijo en un comunicado el presidente Joe Biden, quien había pedido la medida en una orden ejecutiva emitida el año pasado.
Una de cada ocho personas en Estados Unidos (alrededor de 30 millones de personas) de 12 años o más tiene pérdida auditiva en ambos oídos según exámenes de audición estándar, dijo la agencia estadounidense de medicamentos, la FDA.
La venta libre aplicará para los audífonos de conducción aérea, que llevan el sonido amplificado al canal auditivo, donde se mueve a través del tímpano y el oído medio para llegar al oído interno, que envía la señal procesada al cerebro.
Las personas con pérdida auditiva más severa pueden necesitar audífonos de conducción ósea, que evitan el oído externo y medio.
AFP