Arlen Daza Fernández, venezolana y refugiada médica en EE.UU., pidió este viernes a las autoridades norteamericanas que haya una reconsideración y permitan el ingreso de su madre, Hisvet Fernández, a quien se le aprobó el parole humanitario, pero le niegan la autorización de viaje.
Arlen padece de una enfermedad degenerativa. Por ende, para ser intervenida quirúrgicamente, necesita la presencia de su mamá en EE.UU. Esto para que realice las actividades que ella no podrá hacer una vez la operen.
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La señora Hisvet explicó que le aprobaron el parole, pero luego «me niegan la autorización de viaje. Sin embargo, no nos rendimos, y con una abogada introdujimos ayer un recurso de reconsideración para que por favor tomen una medida diferente y me dejen entrar a EE.UU. y cuidar a mi hija».
En Dígalo Aquí, Fernández dio detalles del por qué no le autorizan el permiso de entrada.
«Yo sé que cometí una falta en 2021 por haberme quedado, pero fue durante la pandemia. No podía viajar porque los vuelos estaban prohibidos y no tomé la previsión de hacer extensión de visa. Y eso me lo califican por haberme quedado con la visa vencida», destacó.
Por ende, pidió una reconsideración «porque mi hija me necesita para salvar su vida. Arlen tiene agendada operaciones mayores de columnas. Sin mi presencia no se las van a realizar».
«Necesito a mi mamá»
Arlen, por su parte, manifestó la urgencia de que su madre ingrese a EE.UU.
«Es necesario que mi madre esté conmigo acá en EE.UU. Los cuidados que a mí me indican son cuidados que no pueden ser cubiertos en un tiempo corto. Esto es algo congénito y no tiene cura. A mí me van a realizar unas cirugías cuyo proceso de recuperación va a ser largo. No es salir de la cirugía e irte a casa caminando. Son neurocirugías la recuperación tarda un año», detalló la refugiada médica.
Advirtió que si ella no tiene los cuidados y se somete a la cirugía sin supervisión de su madre, puede tener más daños adversos. «Mi mamá puede ser un apoyo no solo emocional, sino que puede hacer todos los servicios requeridos como cocinar, buscar medicamentos, organizar, limpiar, incluso bañarme. Todas las cosas que se van a requerir».
«Yo no tengo familiares o alguna amistad que pueda cuidar de mí y no puedo pagar a alguna persona privada», alertó.
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