La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos (EE.UU.) sancionó a tres ciudadanos chinos y a tres empresas tailandesas por su implicación en una red de ciberdelincuencia que realizaba amenazas de bomba y solicitudes fraudulentas de ayudas relacionadas con el COVID.
LEE TAMBIÉN: Dígalo Aquí | Orlando Avendaño: El liderazgo de María Corina Machado está comprometido con el cambio
Los chinos fueron identificados como Yunhe Wang, Jingping Liu y Yanni Zheng. Mientras que las tres entidades son: Spicy Code Company Limited, Tulip Biz Pattaya Group Company Limited y Lily Suites Company Limited, por ser propiedad o estar controladas por Yunhe Wang.
«Estos individuos aprovecharon su tecnología de botnet maliciosa para comprometer dispositivos personales, lo que permitió a los ciberdelincuentes obtener de manera fraudulenta asistencia económica destinada a los necesitados y aterrorizar a nuestros ciudadanos con amenazas de bomba», dijo el subsecretario del Departamento del Tesoro, Brian E. Nelson.
La botnet 911 S5 era un servicio malicioso que comprometía las computadoras de las víctimas y permitía a los ciberdelincuentes proxy sus conexiones a Internet a través de estas computadoras comprometidas. Una vez que un ciberdelincuente había ocultado sus huellas digitales a través de la botnet 911 S5, sus delitos cibernéticos parecían remontarse a la computadora de la víctima en lugar de a la suya propia.
LEE TAMBIÉN: Familiares de Ronald Ojeda fueron excluidos de reunión entre fiscalías de Chile y Venezuela
Según el Departamento del Tesoro, la botnet 911 S5 comprometió aproximadamente 19 millones de direcciones IP y facilitó la presentación de decenas de miles de solicitudes fraudulentas relacionadas con los programas de la Ley de Ayuda, Alivio y Seguridad Económica por COVID por parte de sus usuarios, lo que resultó en la pérdida de miles de millones de dólares para el gobierno de EE.UU.
El servicio 911 S5 permitió a los usuarios cometer fraudes cibernéticos generalizados utilizando computadoras de víctimas comprometidas que estaban asociadas a direcciones IP residenciales. Las direcciones IP comprometidas por el servicio 911 S5 también estaban vinculadas a una serie de amenazas de bomba realizadas en todo Estados Unidos en julio de 2022.