Estados Unidos declaró el martes su preocupación por la orden de detención emitida por la justicia de El Salvador contra el expresidente Alfredo Cristiani y cuatro exdiputados, acusados de encubrir a los responsables del asesinato de casi 1.000 civiles a manos de Ejército en 1981, un ataque conocido como la masacre de El Mozote.
«El gobierno de Estados Unidos expresa su profunda preocupación por la decisión tomada el pasado 22 de diciembre por un tribunal de instrucción de emitir órdenes de arresto» en contra de Cristiani (1989-1994) y cuatro exdiputados, señaló un comunicado difundido por la embajada estadounidense en San Salvador.
La justicia salvadoreña acusa a Cristiani, en paradero desconocido, de «encubrimiento personal» por decretar una amnistía en 1993 con la que se evitaba el procesamiento de los responsables de la matanza, una decisión derogada en 2016 tras ser declarada inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia.
La orden de detención afecta también a cuatro exdiputados, entre ellos Rubén Zamora, quien fungió como embajador de El Salvador en Estados Unidos entre abril de 2013 y septiembre de 2014.
Según el gobierno estadounidense, las víctimas de la masacre de El Mozote «merecen justicia», pero considera que la decisión del juzgado de ordenar los arrestos del expresidente y de los exdiputados «lamentablemente» es algo que «no ayuda en ese objetivo».
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«Estas órdenes de captura no hacen avanzar la causa de brindar justicia o hacer rendir cuentas a los asesinos responsables de la masacre de El Mozote», añadió la embajada estadounidense en su cuenta en la red social X.
La masacre ocurrió entre el 9 y el 13 de diciembre de 1981, durante la guerra civil del país. Unidades del Ejército salvadoreño, encabezadas por el batallón contrainsurgente Atlacatl -adiestrado por Estados Unidos-, asesinaron a al menos 988 habitantes, entre ellos 558 niños, de El Mozote y comunidades cercanas.
Los militares participaban en la denominada «Operación Rescate», una misión que tenía como fin acabar con los sospechosos de colaborar con el entonces guerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) del departamento de Morazán, en el noreste del país.
Otras 712 personas que sobrevivieron al ataque abandonaron la zona.
La guerra civil de El Salvador (1979-1992) dejó más de 75.000 muertos, al menos 7.000 desaparecidos y miles de desplazados.
AFP