El Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció el lunes sanciones contra dos altos funcionarios chinos por su rol en los «graves abusos de derechos humanos» contra musulmanes uigures y otras minorías en la región de Xinjiang.
«Las autoridades chinas seguirán enfrentando consecuencias mientras ocurran atrocidades en Xinjiang», dijo Andrea Gacki, la responsable del programa de sanciones en el Departamento del Tesoro.
Las sanciones iban dirigidas a Wang Junzheng, secretario del comité del Partido Comunista Chino del Cuerpo de Producción y Construcción de Xinjiang (XPCC), y a Chen Mingguo, director de la Oficina de Seguridad Pública de Xinjiang.
La medida del Tesoro forma parte de un esfuerzo coordinado de la Unión Europea, Reino Unido, Canadá y Estados Unidos para aumentar la presión sobre Pekín por haber metido en campos de prisioneros a más de un millón de ciudadanos de Xinjiang, en su mayoría uigures musulmanes, y haber utilizado a muchos de ellos en programas de trabajos forzados.
El Tesoro dijo en un comunicado que XPCC es un grupo paramilitar que impulsa los duros controles de Pekín en Xinjiang, en paralelo con la Oficina de Seguridad Pública.
«El gobierno chino trata casi todas las expresiones de fe como un signo de ‘extremismo’ religioso o de separatismo étnico», dijo el Tesoro.
Los objetivos de las operaciones de Pekín en Xinjiang «son a menudo detenidos y supuestamente sometidos a diversos métodos de tortura y ‘reeducación política'», dijo.
Las sanciones pretenden bloquear a estas personas para que no puedan hacer negocios con los estadounidenses ni acceder al sistema financiero mundial. También congelan los activos que puedan tener bajo jurisdicción estadounidense.
Con información de AFP