El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, pidió disculpas el miércoles por causar dolor a las mujeres que lo denunciaron por acoso sexual, pero dijo que nunca tocó a nadie de manera inapropiada y que no renunciará a su cargo.
«No voy a renunciar», dijo Cuomo en su primera conferencia de prensa tras ser blanco de denuncias de acoso por parte de tres mujeres.
El gobernador demócrata pidió disculpas y urgió a los residentes del estado de Nueva York «que esperen los hechos del informe de la fiscal general antes de tener una opinión» sobre lo acontecido.
«Actué de una manera que hizo que personas se sintieran incómodas» pero «no fue intencionado», señaló Cuomo, de 63 años.
«Pido disculpas verdadera y profundamente. Me siento horrible sobre eso, y francamente estoy avergonzado. No es fácil decir esto», dijo al borde de las lágrimas, con la voz temblorosa.
– «Seré una mejor persona» –
«Nunca toqué a nadie de manera inapropiada», afirmó. «Ciertamente nunca, nunca tuve la intención de ofender o hacer daño a alguien o causar dolor a alguien».
Cuomo dijo que cooperará «totalmente» con la investigación independiente que lleva a cabo la fiscal general del estado, Letitia James.
«Seré una mejor persona a raíz de esta experiencia», sostuvo.
Cuomo, que se tornó en una estrella nacional el año pasado por su manejo de la pandemia de covid-19, cayó en desgracia de manera fulgurante desde que estalló el escándalo la semana pasada.
La primera en denunciar una conducta inapropiada del gobernador fue Linda Boylan, de 36 años, que trabajó para su gobierno de 2015 a 2018.
Boylan dijo que Cuomo la besó en los labios sin su permiso, le sugirió que jugaran al póker mientras se desvestían progresivamente con cada derrota hasta quedar desnudos, y se esforzaba por tocarla «en la parte baja de mi espalda, brazos y piernas».
– Besos por doquier –
Días después de la denuncia de Boylan, otra excolaboradora, Charlotte Bennett, de 25 años, dijo al New York Times que Cuomo la acosó el año pasado.
Bennett contó que el gobernador le dijo en junio que estaba abierto a una relación con una mujer de más de 22 años, y le dijo que en su opinión la diferencia de edad en una pareja no afectaba la relación, según el Times.
Bennett dijo que aunque Cuomo nunca trató de tocarla, «comprendí que el gobernador quería acostarse conmigo, y me sentí horriblemente incómoda y asustada».
El lunes, Anna Ruch, de 33 años, que nunca trabajó con Cuomo, relató al Times que en una boda en septiembre 2019 el gobernador colocó la mano en la parte baja de su espalda, y cuando ésta la retiró, sujetó sus mejillas con ambas manos y le preguntó si podía besarla. El momento quedó registrado en una foto.
Cuomo, de origen italiano, dijo que hay «cientos de fotos» suyas besando a hombres y mujeres.
«Es mi manera habitual de saludar», afirmó, y dijo que su padre Mario Cuomo, exgobernador de Nueva York durante tres mandatos, también saludaba así a la gente.
Las disculpas del gobernador no convencieron a las mujeres que lo acusan.
«¿Cómo pueden los neoyorquinos confiar en ti @NYGovCuomo para dirigir nuestro estado si tú ‘no sabes’ cuando te has comportado de manera inapropiada con tu propio personal?», tuiteó Boylan.
Bennett retuiteó un comunicado de su abogada que dice que la conferencia de prensa de Cuomo estuvo «llena de falsedades».
Varios analistas anticipaban que Cuomo formaría parte del gobierno del presidente Joe Biden, pero ahora incluso varios miembros de su partido piden su renuncia.
En las últimas semanas Cuomo ya había sido blanco de duras críticas por retener información sobre el número de fallecidos por coronavirus en las residencias de ancianos del estado de Nueva York.
El legislativo estatal anunció el martes un acuerdo para retirarle los poderes especiales que le otorgó al inicio de la pandemia.
Incluso si supera la crisis generada por el presunto acoso sexual, algunos expertos creen que el escándalo da por tierra con cualquier eventual esperanza de superar a su padre para gobernar el estado durante un cuarto mandato.