El gobierno de Joe Biden dejó en suspenso sus prioridades de deportación, enfocadas solo en extranjeros que constituyan una amenaza a la seguridad pública, nacional y fronteriza de Estados Unidos, para de esa forma cumplir con una orden judicial emitida hace dos semanas.
Los agentes federales de inmigración detuvieron este sábado, las limitaciones autorizadas por el secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), Alejandro Mayorkas, por medio de un memorando fechado a finales de septiembre del año pasado, reportó la cadena de noticias CBS.
El ministerio dijo en una declaración que estaba «totalmente» en desacuerdo con la orden de Tipton, pero que la estaba cumpliendo.
La nota enviada a CBS agrega que “durante el proceso de apelaciones, los agentes y oficiales de ICE tomarán decisiones de ejecución caso por caso de manera profesional y responsable, informados por su experiencia como oficiales de la ley y de la manera que mejor proteja contra las mayores amenazas a la patria”.
-El freno judicial-
El 10 de junio el juez federal Drew Tipton, de la Corte Federal de Distrito del Sureste de Texas, falló a favor de una demanda entablada por los estados de Texas y Louisiana, ambos gobernados por republicanos, quienes alegan que la política de deportaciones del DHS anunciada en septiembre violó la Ley de Procedimiento Administrativo (APA).
“El Poder Ejecutivo puede priorizar sus recursos. Pero debe hacerlo dentro de los límites establecidos por el Congreso”, escribió el juez Tipton. «Usando las palabras ‘discreción’ y ‘priorización’, el Poder Ejecutivo reclama la facultad de suspender los mandatos estatutarios. La ley no sanciona este enfoque», agregó.
En febrero de 2021 Biden suspendió las prioridades que había fijado el expresidente Donald Trump el 25 de enero de 2017, en las que prácticamente puso a los 11 millones de indocumentados en el banquillo de las deportaciones de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE).
Con información de Univisión.