Donald Trump Jr ha recibido un torrente de críticas por vender camisetas burlándose de la muerte de la directora de fotografía Halyna Hutchins después de que Alec Baldwin le disparara accidentalmente en el set la semana pasada.
Las camisetas, que están estampadas con las palabras ‘las armas no matan a la gente, Alec Baldwin mata a la gente’, están siendo vendidas en el sitio web de Trump Jr por 27,99 dólares.
El hecho se produce después de que Baldwin, de 63 años, quien durante mucho tiempo ha sido un abierto defensor del control de armas en los EE.UU., mató por accidente a la directora de fotografía cuando disparó una pistola de utilería en el set de su nueva película ‘Rust’.
Trump Jr lanzó las camisetas a través de una historia de Instagram ayer, instando a sus seguidores a ‘obtener la suya ahora’ antes de publicar una imagen con Photoshop de Baldwin con la camiseta.
De inmediato surgieron críticas que calificaron como “deplorable” que Trump Jr usara la muerte de Hutchins como un truco para “cultivar odio” contra el actor que repuntó en popularidad en los últimos tiempos entre otras cosas por sus imitaciones al expresidente Donald Trump en el programa de comedia estadounidense Saturday Night Live.
Las redes tampoco se quedaron atrás, calificando al truco de Trump Jr como “miserable” y “repugnante”, y al propio hijo del expresidente como alguien capaz de hacer “cualquier cosa para ganar dinero”.
Algunos alentaron a la familia Hutchins a demandar a Trump Jr por intentar sacar provecho de la muerte de Halyna.
Fred Guttenberg, el padre de Jaime Guttenberg, una niña de 14 años que fue asesinada en un tiroteo en la escuela de Parkland en febrero de 2018, tuiteó ‘Sé cómo se siente su familia’ y llamó a Trump Jr ‘la escoria de la tierra’ de una ‘miserable familia’.
Mientras tanto, Trump Jr. ha respondido a la reacción de los medios de comunicación a la muerte de Hutchin y la simpatía generalizada por Baldwin tras el tiroteo fatal.
Como partidario acérrimo de la segunda enmienda y el ‘derecho a portar armas’, Trump Jr. acusó a los medios de “proteger a Baldwin de las críticas porque están de acuerdo con su postura política” y afirmó que Baldwin habría desgarrado a cualquier otro actor si hubiera estado en su lugar, algo que también habrían hecho los medios.
Baldwin describió el asesinato como un “trágico accidente” tras el tiroteo en una publicación de Twitter la semana pasada, y no ha hablado con los medios desde entonces.