Reportaje de La Voz de América
Festejo y paciencia son dos palabras clave para millones de estadounideses que se disponen a celebrar el feriado de Thanksgiving o Día de Acción de Gracias, en un año en que se espera que la mayor cantidad de viajeros en una década salgan a las carreteras o tomen un vuelo en avión para reunirse con familiares y amigos en todo el país.
El clima podría complicar el viaje en muchos sitios de Estados Unidos, entre ellos el golpeado norte de California donde un incendio forestal dejó más de 70 muertos y cientos de desaparecidos.
Según las proyecciones de la Asociación Estadounidense de Automovilistas, AAA, unos 48,5 millones de estadounidenses llegarán a sus destinos a través de las carreteras de la nación.
«Los consumidores tienen mucho que agradecer por esta temporada de vacaciones: salarios más altos, más ingresos disponibles y niveles crecientes de riqueza de los hogares», dijo en un comunicado Bill Sutherland, vicepresidente sénior de AAA Travel. «Esto se traduce en más viajeros que inician la temporada de vacaciones con una escapada de Acción de Gracias».
Desde el martes se espera que más de 54 millones de estadounidenses viajen 50 millas o más para el banquete tradicional, lo que podría producir atascos en autopistas, aeropuertos, ferrocarriles y vías fluviales, según la AAA.
De cumplirse el pronóstico sería el mayor volumen de viajes desde 2005.
Un estimado de American Airlines, la organización comercial de aerolíneas de EE.UU, indicó que una cifra récord de 30,6 millones de pasajeros viajarán por avión durante el feriado del Día de Acción de Gracias, en comparación con los 29 millones de pasajeros estimados hace un año.