El documental sobre la canción «Patria y Vida», himno de las protestas que sacudieron a Cuba en 2021, aterriza en el Festival de Cine Latino de Los Ángeles para mostrar el impacto de la composición que desafió al gobierno comunista de la isla, cuenta su directora, la española Beatriz Luengo.
«Yo empecé a filmar esto porque no podía creer todo lo que nos estaba pasando», declaró Luengo a AFP sobre el impacto de la canción lanzada en febrero de 2021, meses antes de la históricas manifestaciones del 11 de julio en reclamo de más libertades y mejoras económicas en la nación caribeña.
«Patria y Vida: El poder de la música», que se proyecta este viernes en el marco de ese Festival organizado en Hollywood, California, cuenta los bastidores y las consecuencias de esa canción grabada entre La Habana y Miami por los artistas cubanos Yotuel Romero, Descemer Bueno, Maykel Osorbo, El Funky y el grupo Gente de Zona.
«Sesenta años trancando el dominó», reza el estribillo de la composición que utiliza la metáfora del popular dominó para cuestionar al régimen comunista que ha dominado la isla durante seis décadas.
La pieza cosechó rápidamente millones de reproducciones, ganó dos premios Grammy Latinos y catapultó a algunos de sus compositores en la escena internacional. Sin embargo, en Cuba, su éxito también contribuyó al encarcelamiento del rapero Maykel Osorbo en una prisión de máxima seguridad.
Popularizado entre jóvenes cubanos, «Patria y Vida» provocó una airada respuesta del gobierno de Miguel Díaz-Canel y avivó las tensiones en Cuba.
«Lo más importante es que sacó al pueblo de Cuba después de 63 años sin manifestarse», dijo Yotuel Romero, excantante del conocido grupo rapero cubano Orishas.
El rodaje del documental nació tras las amenazas que algunos de los compositores recibieron después del lanzamiento de la canción, confesó Luengo, de 40 años. «Empiezo a sentir mucho miedo y a empiezo a filmarlo todo. Sentíamos que era la manera de defendernos», afirmó.
– Grabación clandestina –
Grabarlo no fue tarea sencilla, cuentan Romero y Luengo, casados desde hace más de una década y radicados fuera de Cuba.
«Hubo gente que arriesgó hasta su vida para poder llevar esto», comentó Romero, quien describió los complicados arreglos para filmar en Cuba.
La tarea recayó en el fotógrafo cubano Anyelo Troya.
«Tuvo que empeñar muchas cosas (…) y al final pudo conseguir una cámara», explicó Romero. Las imágenes de la isla usadas en el documental salieron de Cuba en una tarjeta enviada de forma clandestina a Nicaragua.
Troya fue detenido el 11 de julio de 2021 y sentenciado a un año de cárcel.
Pero lo más desafiante del documental, señaló Luengo, fue conseguir un audio de Maykel Osorbo, detenido en La Habana el 18 de mayo de 2021 y condenado a nueve años de cárcel .
«Rodamos el documental por un año y no conseguíamos [el audio]. Queríamos que tuviera su voz, que la gente pudiera escucharle», aseguró.
Luengo no quiere brindar más detalles para no colocar en peligro «a las muchas personas» que contribuyeron para materializar la grabación clandestina de Osorbo, que es uno de los momentos más emocionantes del documental.
«Está muy enfermo, y muy débil», contó Romero. «Le han puesto una cámara dentro de la celda. Lo que ocurre con Maykel y con todos los presos políticos en Cuba es algo tan injusto y tan horrible», dijo.
– «Romper el miedo» –
Las marchas de julio de 2021, las mayores desde el triunfo de la Revolución en 1959, dejaron un muerto, decenas de heridos y más de 1.800 detenidos, de los cuales 768 permanecen en prisión, según cifras de la agrupación cubana 11J, que opera fuera de la isla.
Cerca de 500 manifestantes fueron condenados, algunos hasta a 25 años de cárcel, según cifras oficiales, acusados de subversión.
La canción se contrapone al eslogan revolucionario cubano «Patria o Muerte, Venceremos» surgido de un discurso del difunto líder Fidel Castro en la década de 1960.
«Viene a cambiar, sobre todo la O por la Y. Esa O de ‘Patria o muerte’ es tú o yo, mi pensamiento o el tuyo. ‘Patria y vida’ es tú y yo», afirmó Romero, subrayando que es «increíble como una canción logra romper el miedo de un pueblo sumido en un tapabocas» durante más de seis décadas.
Para Luengo, la canción ha demostrado que «el arte no se puede silenciar. El arte tiene que seguir siendo una voz para los que no tienen voz».
La también actriz y cantante estima que es un ejemplo para las nuevas generaciones en América Latina. «Agarren un beat, vayan a YouTube. Digan lo que sientan, reivindiquen sus derechos. Ustedes sí tienen una voz», subrayó.
El Festival de Cine Latino de Los Ángeles 2023 va hasta el 4 de junio.
AFP