El cantante estadounidense Kanye West ha sido viral en las últimas semanas por sus publicaciones en redes sociales respecto al actual novio de su exesposa Kim Kardashian, el comediante Pete Davidson.
Desde intentar burlarse de él hasta publicar fotos de Kim con sus hijos pidiéndole que vuelvan a ser una familia, las publicaciones de West han ido escalando en la violencia del lenguaje usado. Recientemente compartió un video de animación por «stop motion» en el que al final le quitaba la cabeza al personaje que representaba a Pete Davidson.
Ese video generó bastante revuelo entre seguidores, tanto del rapero como de la empresaria Kim Kardashian y su actual pareja. En particular, el escritor y comentarista de The Daily Show, el surafricano Trevor Noah, habló del divorcio público entre las celebridades.
“Creo que esta situación ya pasó a ser una conversación más trascendental, salió del plano de los tabloides”, declaró Noah en una sección del programa de televisión que dirige desde 2015.
Ante los comentarios que el opinador hizo, West decidió insultarlo en la red Instagram con epítetos racistas que ya fueron eliminados de la plataforma.
Por los insultos que empleó el rapero, su cuenta de Instagram fue suspendida durante 24 horas.
Un portavoz de Meta, compañía propietaria de la red social, le dijo al medio estadounidense Huffington Post que la suspensión de la cuenta se dio porque el artista violó las políticas en contra de los discursos de odio y acoso digital.
Kanye West hizo una versión de la canción «Kumbaya» en la que le decía una palabra utilizada como ataque racista contra personas afrodescendientes.
“Koon baya my lord”, escribió. La primera palabra se ha usado históricamente para deshumanizar a las personas negras.
De acuerdo con el diario The Guardian, esa palabra es empleada para señalar a personas afrodescendientes que traicionan su propio origen étnico.