Afirmaciones de que el líder opositor colombiano Gustavo Petro fue culpado por el asesinato de tres niños y que su objetivo en la toma del Palacio de Justicia en Bogotá, de noviembre de 1985 – realizada por el M-19, grupo guerrillero del que él hacía parte -, era desaparecer ese expediente, han sido compartidas más de 3.500 veces en redes sociales al menos desde 2015 y han vuelto a resurgir en 2021. Sin embargo, su nombre no aparece en la investigación por dicho crimen. A su vez, Petro fue encarcelado unas semanas antes, el 25 de octubre de 1985, por porte ilegal de armas, no por asesinato.
“Petro guerrillero, delincuente y asesino. Ojo con esto país sin memoria!!. Hermanos Zuleika, Yidid y Xioux. El objetivo principal de Gustavo Petro de la toma del palacio de justicia, fue desaparecer los expedientes donde era culpado por asesinar con tiro de gracia a estos tres hermanos de 5,6 y 7 años y por lo cual se encontraba preso”, dice una de las publicaciones compartidas en Facebook (1, 2) y Twitter (1), acompañadas por fotografías de tres niños.
Luego, las entradas agregan: “En marzo de 1987 Petro salio de la cárcel modelo ya que todas las pruebas habían desaparecido”.
Las afirmaciones circulan al menos desde 2015 (1, 2)
Toma del Palacio de Justicia
La leyenda de la imagen hace referencia a una incursión de la exguerrilla del M-19 en el centro de Bogotá el 6 de noviembre de 1985, acción conocida como la toma del Palacio de Justicia. Un comando de rebeldes se tomó la sede del Poder Judicial por asalto y capturó a varios rehenes hasta el día siguiente, cuando las Fuerzas Militares ingresaron al lugar abriendo fuego. El saldo fue de 94 muertos, entre ellos 11 magistrados de la Corte Suprema, y una docena de civiles desaparecidos.
Gustavo Petro, excandidato presidencial en 2018 y actual congresista, perteneció al M-19. Tras el desarme de la guerrilla, en 1990, se dedicó a la política.
Porte ilegal de armas
Contrario a lo que afirman las publicaciones en redes, Gustavo Petro no estuvo detenido por el asesinato de tres niños. Según su abogado, Rafael Barrios, el congresista fue detenido el 25 de octubre de 1985 por porte ilegal de armas. Barrios corroboró su afirmación con dos documentos que envió a AFP Factual.
Uno de ellos, firmado por el mayor del ejército colombiano Francisco Ruiz Florián, da cuenta de una operación militar en la que cayó el entonces guerrillero junto a dos de sus colegas. Según el relato, Petro se escondía en un túnel construido en una casa en Zipaquirá, un municipio cercano a Bogotá, cuando fue hallado con armas, “bombas de fabricación casera y propaganda subversiva”.
Los detenidos fueron puestos “a disposición del Comando de la Décimo Tercera Brigada” del ejército, concluye el documento.
En otro archivo enviado por Barrios se puede leer la sanción contra Petro y sus compañeros:
“Artículo primero: Sancionar a los particulares Gustavo Francisco Petro Urrego, Luis Alfonso Lopez Duque y Hector Alirio Borbon Cardenas, conocidos en autos, con 18 meses de arresto para cada uno por porte ilegal de armas de fuego de defensa personal, municiones y explosivos”, reza el documento, que no hace mención a la muerte de los tres niños.
Ese texto tiene fecha del 6 de noviembre de 1985, el día que empezó la toma del Palacio de Justicia. El abogado de Petro informó a AFP Factual que su cliente salió de prisión en febrero de 1987, y no en marzo, como aseguran las publicaciones. Es decir, estaba recluido al momento de la incursión guerrillera.
Esa afirmación es respaldada por el Consejo de Estado, tribunal supremo de la administración pública, que en 2013 estudió una demanda contra el político. De acuerdo con la investigación del tribunal, luego de esa condena del 6 de noviembre de 1985 Petro fue “trasladado a la Cárcel Modelo [en Bogotá], lugar en el que estuvo hasta el 6 de febrero de 1987, fecha en la que se rebajó su pena y se le otorgó la libertad por el cumplimiento de la condena”.
Esa versión difiere con la de las publicaciones, que aseguran que salió de la cárcel porque “las pruebas habían desaparecido”.
Por su parte, el actual opositor niega haber planificado la toma del Palacio de Justicia desde la cárcel y alega que no tenía armas cuando fue detenido.
Tres niños asesinados
Los hermanos Zuleika, Yadid y Yoluk Álvarez fueron secuestrados el 6 de octubre de 1981 cuando se dirigían al colegio en el norte de Bogotá y asesinados en Gachalá, a unos 140 kilómetros de la capital, entre finales de mayo y comienzos de julio de 1982, según un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de 1992. El reporte detalla que eran hijos de Jader Álvarez, “un acaudalado negociante” cuya “vinculación con el narcotráfico” era de conocimiento público.
Según ese organismo, un grupo de universitarios, en el que no figura Petro, fueron responsabilizados por el “Estado Mayor del F‑2 Policía Nacional” por el secuestro y homicidio de los niños Álvarez. De acuerdo con la Procuraduría colombiana, citada por la CIDH, también fueron señalados de integrar “una célula al parecer del M‑19”.
Los supuestos verdugos desaparecieron luego. El mismo documento relata que fue una “represalia” de Álvarez con la “anuencia” de miembros del “F-2”, un cuerpo policial, y “algunos particulares” por el crimen contra sus hijos.
Tras ese giro en el caso, la Comisión declaró que el gobierno dejó de “cumplir con su obligación de respetar y garantizar” el derecho a la vida y la libertad.
El 12 de marzo de 1987 la justicia militar archivó la investigación contra los uniformados involucrados por sobreseimiento, pero en 2011 la Corte Suprema de Justicia pidió revisar esa decisión, según una copia del proceso publicada por la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad del Rosario.
En ninguno de los dos documentos, el de la CIDH y el de la Corte Suprema de Justicia, se hace mención a Gustavo Petro o “Aureliano”, el alias con el que se identificaba en la guerrilla.
La publicación viral en redes también fue verificada por ColombiaCheck.