La médica salvadoreña María Eugenia Barrientos afirma en un video que las variantes del SARS-CoV-2, en particular la Delta, han surgido después de que comenzó la campaña de vacunación contra el covid-19, y que las mutaciones de un virus suelen ser más débiles y no más fuertes que el virus original. Pero estas afirmaciones, que han sido compartidas más de 11.000 veces en redes sociales desde el 18 de julio pasado, son falsas, de acuerdo con virólogos expertos consultados.
“Todo eso es mercadeo”, afirma la doctora Barrientos sobre la variante Delta plus del SARS-CoV-2 en una secuencia compartida en Facebook con más de 270.000 reproducciones.
“Yo me fui a buscar cuándo fue el primer caso de la Delta en Inglaterra, el primer caso de la Delta en India y resulta que las dos son después de vacunar”, afirma. “Explíquenme todos qué pasó 10 meses atrás. (…) Las cepas nunca fueron importantes antes de la vacunación; yo no oí mencionar nada. Resulta que entre noviembre y diciembre comienzan a vacunar y ya oyes de la cepa en enero, cepa en marzo”.
La médica también sugiere que esta variante no reviste gravedad y hace un llamado a “despertar la lógica” para evitar “cosas muy graves”, que no detalla.
El video también circuló en Twitter.
A fines de junio de 2020 la Junta de Vigilancia de la Profesión Médica de El Salvador citó a Barrientos para que explicara el funcionamiento de su protocolo para el tratamiento del covid-19, publicado ese mes en sus redes sociales y elaborado, según refirió, en base a su experiencia con pacientes. Allí recomienda el uso de antiinflamatorios, antigripales y antisépticos bucales para tratar la enfermedad.
La cita de la Junta generó polémica e incluso el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, se expresó en defensa de la doctora.
En el pasado, Barrientos ha sostenido que no hay pacientes asintomáticos de covid-19 y que la enfermedad solo puede transmitirse a través de la tos y del estornudo, afirmaciones ya verificadas por la AFP (1, 2). En un video anterior, además, aseguró que la aparición de nuevas variantes del SARS-CoV-2 en el intervalo de pocos meses no era posible.
Las variantes del coronavirus
“Una variante es una versión de un virus que tiene diferencias genéticas en regiones de importancia biológica, respecto de un genoma de referencia”, explicó a AFP Factual Carolina Torres, integrante de Proyecto Argentino Interinstitucional de genómica de SARS-CoV-2. “En el caso del SARS-CoV-2 las diferencias genéticas se definen respecto a los virus iniciales que se secuenciaron en China a fines de 2019”, precisó.
La mayoría de los cambios en un virus, que se generan de manera natural por su propio proceso de replicación, tienen escaso o nulo efecto sobre sus propiedades. Sin embargo, como se lee en el sitio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), “algunos cambios pueden influir sobre algunas de esas propiedades, como por ejemplo su facilidad de propagación, la gravedad de la enfermedad asociada o la eficacia de las vacunas, los medicamentos para el tratamiento, los medios de diagnóstico u otras medidas de salud pública y social”.
La OMS tiene dos definiciones funcionales para este tipo de variantes del SARS-CoV-2: las de interés (VOI) y las de preocupación (VOC, por sus siglas en inglés).
Las primeras designan variantes que se comportan de manera diferente a una referencia o cuyo genoma presenta mutaciones que llevan a cambios que pueden afectar las características del virus, como su transmisibilidad o la gravedad de la enfermedad que ocasiona. Una variante también es de interés si se ha identificado en circulación comunitaria, múltiples casos de covid-19, grupos, o en múltiples países.
Las variantes de preocupación, por su parte, están asociadas a uno o más cambios en el virus cuyo impacto puede resultar significativo para la salud pública mundial. Estos son “aumento de la transmisibilidad o cambio perjudicial en la epidemiología del covid-19; aumento de la virulencia o cambio en la presentación clínica de la enfermedad; o disminución de la eficacia de las medidas sociales y de salud pública o de los medios de diagnóstico, las vacunas y los tratamientos disponibles”.
La variante Delta, detectada por primera vez en India, comenzó a considerarse una variante de preocupación en mayo de 2021.
La variante Delta y las campañas de vacunación
La médica Barrientos asegura que en India se comenzó a vacunar en “febrero, marzo” y que la variante Delta apareció a “fines de marzo, principios de abril”. Esta afirmación es errónea.
India comenzó su campaña de vacunación el 16 de enero de 2021. La variante Delta o B.1.617.2 fue detectada en diciembre de 2020 y el linaje del cual proviene, el B.1.617, ya había sido identificado en octubre.
“Las primeras detecciones de las variantes tanto de interés como de preocupación que vemos en este momento, incluyendo la Delta, se realizaron antes de los procesos de vacunación en todo el mundo”, dijo a AFP Factual la viróloga Torres.
Con ella concuerda Álvaro Fajardo, doctor en Ciencias Biológicas e investigador en el Laboratorio de evolución experimental de virus del Instituto Pasteur, Uruguay: “Todas las variantes de preocupación, Alpha, Beta, Gamma y Delta, surgieron antes de que se empezara a vacunar. Que después se hayan hecho más conocidas es otro tema. Al empezar a dispersarse y a copar una región particular estableciéndose como predominantes, es obvio que se hablará más de ellas. Pero habían surgido antes”.
Gran Bretaña inició su vacunación el 8 de diciembre de 2020 y la variante B.1.1.7 o Alpha fue detectada por primera vez en el país en septiembre de ese año; no en enero de 2021, como afirma Barrientos.
Lo mismo puede decirse de la variante Gamma, cuyos primeros registros en Brasil datan de octubre. En ese país la campaña de vacunación inició el 17 de enero de 2021.
“No se conoce el origen de estas variantes”, remarcó Torres, del proyecto argentino de genómica.
La especialista dijo a la AFP que algunas investigaciones proponen que pudieron haber emergido en personas con un sistema inmunológico comprometido, donde el virus puede multiplicarse en mayor cantidad y durante más tiempo: “En pacientes de este tipo, a los que se ha hecho estudios genómicos de seguimiento, se ha visto muchas veces la incorporación de varias de las mutaciones que luego se ven en las variantes de preocupación”.
Pero por ahora es solo una hipótesis, aclaró Torres. “En cualquier caso, las variantes del SARS-CoV-2 no tienen nada que ver con la vacunación”, concluyó.
La viróloga Vivian Luchsinger, académica de la Universidad de Chile, está de acuerdo:
¿Los virus mutan hacia formas “más suaves”?
“Decir que [la variante Delta] es más agresiva es un error. Porque las mutaciones de la madre son más suaves o menos agresivas, generalmente”, afirma Barrientos en el video. Nuevamente, la afirmación es errónea.
“No es cierto que las mutaciones sean necesariamente más ‘suaves’ que el virus original”, dijo Luchsinger a la AFP. “Si los cambios que generan las mutaciones en los componentes del virus le dan ventajas a ese virus, este va a prevalecer sobre otros y se va a replicar. Pero si los cambios no lo favorecen, ese virus quedará en desventaja”.
“Los virus adquieren mutaciones por dos motivos: uno que se conoce como deriva génica o azar, que es simplemente la incorporación de cambios que no generan ningún impacto biológico específico”, explicó Torres a AFP Factual. Y agregó que existe otro proceso que “tiene que ver con la selección natural: mutaciones que dan ciertas ventajas y que se fijan en los genomas”.
Fajardo coincide: “Las mutaciones se van dando al azar, pero cuando una le da una ventaja a un virus, se fija”, dijo, descartando la afirmación de la médica Barrientos. El virólogo detalló:
Por su parte, Torres explicó que la naturaleza impredecible de los virus impide afirmar categóricamente que una variante será “más o menos débil” que el virus original.
“En general, cuando se producen estos fenómenos, lo que vemos es una mayor transmisibilidad, pero eso no tiene una vinculación real con que las variantes sean más o menos virulentas”, dijo a la AFP.
“Si tuviéramos que responder si es cierto que las mutaciones de un virus son ‘más suaves’ que en el virus original, la respuesta es no necesariamente”, explicó. En realidad, es un proceso complejo e impredecible, “que depende de la interacción de los virus con los hospedadores”, concluyó Torres.
Estudios recientes indican que las variantes de preocupación tienen una tendencia a dar infecciones más severas y con mayor riesgo de hospitalización que las de la primera ola.