Una caravana de migrantes en Chiapas, que incluye a venezolanos, exigió condiciones para transitar con seguridad y evitar que se repita una tragedia como la de San Antonio, Texas, donde murieron 53 migrantes en la parte trasera de un camión.
La caravana de miles de migrantes, que partirá este viernes desde Tapachula, en la frontera con Guatemala, solicitó al Gobierno de México autobuses a través de un corredor humanitario que llegue hasta Nuevo León, estado que limita con Estados Unidos.
Los migrantes señalaron que llevan consigo unas 400 mujeres embarazadas y mil niños que transitarán por la carretera costera con el fin de llegar a la aduana migratoria de Huixtla, Chiapas.
Jonathan Enrique Ávila, migrante de Venezuela, indicó que si es necesario pagar el combustible de los autobuses, estarían dispuestos a cooperar todos con tal de evitar más riesgos en su tránsito.
En este nuevo éxodo estimó que podrían caminar unas ocho mil personas de países como Venezuela y Haití, regiones como África y Asia, e incluso acompañados por mexicanos que también buscan cruzar a Estados Unidos.
Los migrantes varados en el sur de México se han solidarizado con los 53 migrantes que han fallecido en San Antonio, que incluye 27 mexicanos, siete guatemaltecos y 14 hondureños.
Pese a los riesgos, los migrantes aseguraron que la caravana no se va a detener.
Con información de LópezDóriga.com