Los guardacostas y la marina italiana enviaron varias embarcaciones para ayudar a 1.300 migrantes en el Mediterráneo central, la ruta migratoria más peligrosa del mundo, menos de dos semanas después de un mortal naufragio en las costas del país.
Tres embarcaciones de guardacostas «intervienen a unas 70 millas náuticas (unos 130 km, ndlr) en el sur de Crotona (Calabria, sur) para socorrer a un gran barco que lleva unos 500 migrantes a bordo», anunciaron los guardacostas en un comunicado.
Otras tres embarcaciones de guardacostas, entre ellas un barco de alta mar, el «Dattilo», están ayudando a otros dos barcos que transportan a unas 800 personas.
Estas dos embarcaciones se encuentran a 180 km al sureste de Calabria, según la misma fuente.
«El rescate (…) es especialmente complicado a causa del elevado número de personas a bordo de las embarcaciones a la deriva», según los guardacostas, que difundieron fotos que muestran a tres embarcaciones sobrecargadas.
Las operaciones de rescate continuarán en las próximas horas, con el apoyo adicional de un avión y otro barco el alta mar.
Ante esta situación, los guardacostas solicitaron la ayuda de la marina, y el ministerio de Defensa indicó en un comunicado que ordenaron «una intervención inmediata» del barco militar «Sirio», que «se dirige al lugar lo más rápido posible».
Un naufragio ocurrido hace unas dos semanas frente a la ciudad de Crotona dejó al menos 73 muertos. La justicia inició una investigación sobre la tragedia, especialmente para tratar de explicar la llegada tardía de los equipos de rescate.
Según el ministerio del Interior, 17.592 personas llegaron desde el 1 de enero a Italia, frente a 5.976 en el mismo periodo de 2022 y 5.995 en 2021, o sea casi el triple.
AFP.