Más de 3.000 migrantes murieron en el mar en 2021 mientras trataban de llegar a Europa, el doble que el año anterior, informó la ONU este viernes.
«De ese total, 1.924 personas fueron declaradas muertas o desaparecidas en las rutas del Mediterráneo central y occidental, mientras que otras 1.153 murieron o desaparecieron en la ruta marítima del noroeste de África hacia las islas Canarias», declaró Shabia Mantoo, una portavoz de ACNUR, la agencia de la ONU para los refugiados, en Ginebra.
En 2020, se registraron 1.544 muertes en ambas rutas.
«Resulta alarmante que, desde principios de año, otras 478 personas hayan muerto o desaparecido en el mar», afirmó Mantoo.
Según Acnur, la pandemia de covid-19 y el cierre de fronteras tuvieron un impacto sobre los flujos migratorios ya que muchos refugiados y migrantes recurrieron a traficantes para intentar llegar a Europa.
La mayoría de las travesías en mar se hacen a bordo de embarcaciones neumáticas abarrotadas y en mal estado. Muchas de estas embarcaciones se desinflan o vuelcan, matando a sus pasajeros.
«El viaje en mar desde los Estados costeros de África del Oeste, como Senegal y Mauritania a las islas Canarias es largo y peligroso y puede durar hasta 10 días», subrayó la portavoz de ACNUR durante una rueda de prensa en Ginebra.
«Muchas embarcaciones se desviaron o desaparecieron sin dejar rastro en estas aguas», continuó.
AFP