Activistas y beneficiarios pidieron esta semana al presidente Joe Biden la extensión de un amparo migratorio que protege a 863,880 extranjeros en Estados Unidos cuyos permisos vencen entre 2025 y 2026, bajo la figura del Estatus de Protección Temporal (TPS, por su sigla en inglés).
Esta semana activistas y beneficiarios estuvieron a pocos metros de la Casa Blanca, alzando su voz para que la propuesta sea escuchada en esa instancia ejecutiva.
Los activistas le están solicitando a Joe Biden extender este alivio por al menos 18 meses, lo que le permite la ley para ampliar el permiso de trabajo para estas personas y protegerlas de una eventual deportación.
Los participantes en el llamado destacaron el aporte económico hecho por los amparados por el TPS y las raíces que tienen en Estados Unidos la mayoría de los amparados con este programa con hijos ciudadanos estadounidenses.
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Dentro de las propuestas que se han hecho está la de una prórroga automática, que permita descongestionar los procesos del Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS) y le otorgue certeza a los inmigrantes para crear un plan de acción.
Además han solicitado al presidente Biden que amplíe la designación para incluir a indocumentados de los 16 países, que llegaron después de la fecha límite establecida por el gobierno para cada país.
La organización Alianza TPS lideró el llamado que se hizo en Washington DC para exigirle al gobierno de Joe Biden que extienda el Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés).