Unos 1.000 migrantes trataron de entrar el martes por la mañana en el enclave español de Melilla, en el norte de Marruecos, pero no lo consiguieron, días después del mayor intento de salto de la valla fronteriza, informaron las autoridades locales.
«Sobre las 06H00 de hoy (05H00 GMT), el dispositivo anti-intrusión de la Comandancia de la Guardia Civil ha detectado la aproximación al vallado de un numeroso grupo de migrantes, formado por unas mil personas, que conforme se han ido acercado al perímetro, de forma coordinada y perfectamente organizada, se han dividido en varios grupos», explicó la delegación del gobierno en Melilla en un comunicado.
Hacia las 08H00 (07H00 GMT), «uno de esos grupos, estimado en unas 400 personas, ha logrado llegar hasta el vallado», aunque fueron finalmente neutralizados por las fuerzas de seguridad marroquíes, continuó la nota.
Ninguno de ellos consiguió finalmente saltar la valla y entrar en Melilla.
El enclave español registró el pasado miércoles el intento de salto más multitudinario hasta la fecha, según las autoridades, protagonizado por 2.500 migrantes. El jueves, otros 1.200 volvieron a intentarlo.
En total, en estos dos días, 871 migrantes consiguieron su propósito y llegaron a la ciudad española, por 1.092 en todo 2021.
Melilla y el otro enclave español de Ceuta -unos 400 km al oeste- son las dos únicas fronteras terrestres entre África y la Unión Europea y, por lo tanto, sirven de puente a otros países europeos de muchos migrantes africanos.
En mayo del año pasado, más de 10.000 personas, en su gran mayoría marroquíes, entraron en Ceuta aprovechando la relajación de los controles fronterizos del lado marroquí durante una crisis diplomática con España.
El detonante de las fricciones entre Madrid y Rabat fue la recepción en España, para ser tratado de coronavirus, del líder del movimiento independentista saharaui del Frente Polisario, Brahim Ghali, enemigo jurado de Rabat.
Pese a que las tensiones se han rebajado en los últimos meses, la situación no se ha normalizado totalmente y la embajadora de Marruecos en España, llamada a consultas durante la crisis de Ceuta, todavía no ha regresado a Madrid.
AFP