El Gobierno de Colombia presidido por Gustavo Petro confirmó que el diálogo de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) «queda suspendido» tras el atentado contra una base militar en Arauca, que dejó dos muertos y 27 heridos.
Este anuncio se produjo un día después de que el presidente colombiano, Gustavo Petro, declaró que el atentado «cierra un proceso de paz con sangre».
«Una volqueta cargada de explosivos que hiere a 27 jóvenes y mata a dos (…) puesta por el ELN con quienes estábamos conversando de paz (…) Es una acción que cierra un proceso de paz con sangre», expresó Petro.
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Debido a la gravedad de las heridas, al menos 18 soldados fueron trasladados de Puerto Jordán al Hospital Militar de Bogotá, informó RCN.