Un comité parlamentario israelí dio luz verde el martes de madrugada a un proyecto de ley para disolver la cámara, un paso crucial hacia la convocatoria de nuevas elecciones anticipadas, las quintas en menos de cuatro años.
Los diputados israelíes aprobaron el miércoles en lectura preliminar la disolución de la Knéset y la convocatoria de nuevas elecciones después de que el primer ministro Naftali Bennett anunciara el fin de la variopinta coalición en el poder desde junio de 2021.
Antes de la votación, un comité parlamentario analizó esta ley que abre la vía a elecciones anticipadas el 25 de octubre o el 1 de noviembre.
Poco después de medianoche, el comité anunció que había terminado sus trabajos y había adoptado con «unanimidad» este proyecto de ley, que en las próximas horas deberá someterse a la asamblea plenaria de la Knéset en primera lectura.
Sus 120 diputados deben aprobar este texto en tres lecturas.
En virtud de un acuerdo de partición del poder entre Bennett y el actual ministro de Exteriores, Yair Lapid, este segundo será primer ministro después de la disolución del Parlamento y hasta la formación del propio gobierno.
En junio de 2021, ambos sellaron un acuerdo histórico en Israel para una coalición de partidos de derecha, centro, izquierda y uno árabe que terminó con doce años de gobierno de Benjamin Netanyahu.
En las últimas semanas, la coalición de Bennett sufrió varios reveses que la fragilizaron gravemente.
El pasado 6 de junio, la oposición logró una mayoría y logró que no se prorrogara una normativa que prevé que a los más de 475.000 colonos de Cisjordania, territorio palestino ocupado por Israel, se les aplique la ley israelí.
La disolución del Parlamento hace que la ley se prorrogue automáticamente.
AFP.