En las habituales audiencias papales, la solemnidad y el silencio predominan, pero este pasado viernes el Papa Francisco inauguró un encuentro sin precedentes en el imponente palacio apostólico del Vaticano, reuniendo a humoristas de renombre mundial como Whoopi Goldberg, Jimmy Fallon, Chris Rock, y las españolas Cristina Castaño, Sara Escudero y Victoria Martín.
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Este evento histórico marcó la primera vez que un pontífice organizó tal iniciativa, enfocada en destacar la importancia del humor y la capacidad de hacer reír en tiempos tumultuosos.
La información fue compartida por el diario El País
El Papa ofreció un discurso enfatizando la necesidad de cultivar el humor y la alegría, transmitir serenidad, y utilizar la risa para superar dificultades y desafíos cotidianos.
Reconoció el valor del talento de los humoristas para difundir paz entre las personas, aliviando tensiones con ironía y un enfoque ligero hacia la vida. Además, el Papa compartió su propia práctica diaria de rezar por el sentido del humor, una gracia que considera fundamental para abordar los desafíos con el espíritu adecuado.
Destacó el potencial del humor para denunciar abusos de poder, visibilizar realidades ocultas y criticar comportamientos inadecuados, siempre promoviendo la inclusión y evitando generar miedo o ansiedad como a menudo lo hace la comunicación convencional.
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Por último, agradeció a los cómicos por despertar el sentido crítico a través de la risa, narrando historias de vida desde su perspectiva única y abordando tanto grandes como pequeños problemas.