Más de 500.000 personas solicitaron el pase ferroviario gratuito para trenes de corta y media distancia en España, una medida instaurada para combatir el alza de los precios, informó este jueves el gobierno español.
La medida entró en vigor este jueves por un periodo de cuatro meses, y prevé la gratuidad de los abonos para las líneas ferroviarias regionales y de cercanías del operador nacional RENFE.
Con ella se pretende ayudar al poder adquisitivo de los españoles, fuertemente golpeado por una inflación que, desde junio, se sitúa por encima del 10% en términos interanuales, un nivel no visto desde mediados de los años 1980.
A fecha del 31 de agosto, «hubo en torno a medio millón de inscritos en la página web de Renfe» para beneficiarse de esta medida, aseguró este jueves el presidente del gobierno, Pedro Sánchez, en la emisora Cadena Ser. De ellos, 425.000 recibieron ya el pase gratuito, precisó.
La medida, que según el gobierno podría ampliarse más allá del 31 de diciembre si fuera necesario, afecta a las redes de cercanías de las grandes ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia y Sevilla, pero también a los trenes de media distancia.
Para beneficiarse de este abono, los usuarios deberán abonar una fianza de 10 o 20 euros, que podrán recuperar si realizan un mínimo de 16 viajes de aquí a finales de diciembre, informó Renfe en un comunicado.
Según la compañía ferroviaria española, 75 millones de viajes estarán cubiertos por el pase gratuito.
Simultáneamente, el gobierno destinó una partida de 220 millones de euros (igual en dólares) para que los municipios reduzcan un 30% los precios de los abonos de autobuses, metro y tranvías.
Además, estas medidas pretenden fomentar el transporte público y reducir el uso del vehículo privado y, consiguientemente, el consumo de combustibles, cuyos precios se dispararon desde el inicio de la guerra en Ucrania.
AFP