La Fiscalía General de Panamá identificó a 20 víctimas de abusos y violaciones a menores de edad en albergues y hasta la fecha ha imputados a ocho personas, informó el martes el jefe del ministerio público.
«Hasta esta mañana (del martes) tenemos 20 víctimas identificadas y 18 casos abiertos, no obstante estas cifras pueden variar porque es una investigación dinámica», dijo el Procurador General de la Nación (Fiscal General), Javier Caraballo, en conferencia de prensa.
Los fiscales responsables de las investigaciones aún continúan en terreno realizando entrevistas, detalló. Las investigaciones iniciaron en agosto del año pasado y desde el 1 de marzo la Procuraduría de la Nación reforzó el equipo de trabajo encargado del caso, indicó Caraballo. «No vamos a cesar nuestras investigaciones hasta que cada una de las personas vinculadas a estos hechos responda por los posibles delitos en los que estén vinculados», aseguró.
Aunque las investigaciones iniciaron hace más de seis meses, no fue hasta este mes cuando se realizan las primeras detenciones. De los ocho imputados, cuyas identidades no fueron reveladas, cinco están en prisión preventiva.
Los hechos habrían ocurrido cuando los menores de edad se encontraban al cuidado de albergues administrados por organismos no gubernamentales que reciben fondos públicos, y que están bajo supervisión de la Secretaria Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENNIAF).
El caso saltó a la luz a raíz de un informe de una subcomisión de la Asamblea Nacional de Panamá, que determinó que desde 2017 decenas de niños sufrieron abusos, malos tratos físicos y verbales, abortos forzados y malas condiciones de vida en al menos 14 albergues.
Tras el escándalo de abuso de menores, renunció el fiscal general antecesor de Caraballo, Eduardo Ulloa, y hace unos días, también dejó el cargo la propia directora de la SENNIAF, Mayra Silvera.
El caso ha generado indignación en la ciudadanía panameña, que protesta periódicamente pidiendo sanciones para los responsables.
Con información de AFP