El exmandatario de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, continúa liderando la carrera electoral rumbo al 2 de octubre ante el presidente Jair Bolsonaro, según una encuesta del Instituto Datafolha divulgada este jueves.
A poco más de dos semanas de la primera vuelta, Lula mantiene 45% de las intenciones de voto frente a 33% de Bolsonaro, un escenario de «estabilidad total» en relación al sondeo de la semana pasada (45% vs. 34%), dijo la directora de Datafolha, Luciana Chong, al presentar los resultados.
Con la mayoría de los apoyos divididos entre Lula y Bolsonaro, éstas son consideradas las elecciones más polarizadas en décadas en Brasil.
El centroizquierdista Ciro Gomes marcha tercero, con 8%, empatado técnicamente con la centrista Simone Tebet, que tiene 5%.
Pese al escenario de estabilidad, con variaciones dentro del margen de error de +/- 2 puntos, el apoyo al mandatario ultraderechista creció en los últimos meses, recortando la distancia con Lula, quien en mayo pasado lo superaba por 21 puntos.
Para vencer en primera vuelta, un candidato precisa más del 50% de los votos válidos (sin blancos ni nulos). Siguiendo ese criterio, Lula conseguiría el 48% de los votos válidos.
En un eventual balotaje, vencería a Bolsonaro por 54% a 38%.
El presidente conservador, sin embargo, desacredita los sondeos.
«Aquí no está la mentirosa Datafolha. Aquí está nuestro Datapueblo», dijo ante una multitud de seguidores en Brasilia la semana pasada, un discurso que es replicado por muchos de sus más fervientes seguidores.
Datafolha afirma que en sus encuestadores vienen siendo hostilizados de forma creciente al hacer su trabajo en diversas regiones del país.
Este miércoles, por ejemplo, una mujer fue filmada y expuesta en las redes sociales por un hombre que la acusó de no querer entrevistarlo porque es seguidor de Bolsonaro.
«Si dices que apoyas a Bolsonaro, ella corre… miren cómo corrió, vean la mentira, la farsa», decía el hombre, mientras perseguía a la encuestadora por la calle.
Chong explicó a la AFP que «no aceptar entrevistas de personas que se ofrecen para responder el cuestionario es una de las principales normas» para garantizar que las encuestas no son sesgadas.
«El abordaje debe ser aleatorio», dentro de los parámetros definidos al construir la muestra para que sea representativa, como ciudad, barrio, edad y género de los entrevistados.
Para su última encuesta, Datafolha entrevistó a 5.926 personas entre el 13 y el 15 de septiembre en 300 ciudades brasileñas.
AFP.