La información la confirmó Eduardo Stein, representante especial conjunto de Acnur y la OIM para los refugiados y migrantes venezolanos en la región, a través de un comunicado de prensa a través del cual indicó que ya son 4,3 millones los venezolanos que han salido de su país por la crisis económica, política, y social que vive la nación sudamericana y “crece a diario”.
A través de declaraciones publicadas por la oficina de las Naciones Unidas, Stein indicó que por el momento “no se ve un final para este movimiento masivo de población” y advirtió que son cada vez más los venezolanos con vulnerabilidades, en necesidad de protección internacional y acceso a servicios básicos y oportunidades de empleo.
Resaltó que los países receptores con un mayor número de migrantes se encuentran en América Latina y el Caribe y que a pesar del esfuerzo de sus gobiernos por “brindar protección y asistencia, así como para promover la inclusión social y económica (…) no cabe duda de que la situación de las personas refugiadas y migrantes venezolanas está superando las capacidades de los países y de la región en su conjunto”
De los más de 4 millones de migrantes venezolanos, más de 1,4 millones se encuentran en Colombia. Le sigue Perú y Chile, según datos de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
“Solo a través de una respuesta regional coherente, predecible y armonizada, los países de la región podrán enfrentar el desafío humanitario sin precedentes de responder a las necesidades de un número creciente de personas refugiadas y migrantes venezolanas”, indicó Stein en el comunicado.
Entre sus peticiones estuvo la de preservar el acceso al asilo y mantener políticas de entrada flexibles, además de regular y documentar a los migrantes venezolanos pues, si bien reconoce “el derecho soberano de los Estados a decidir qué medidas tomar para permitir el acceso a sus territorios”, Stein aseguró que le preocupa que las trabas puedan obligar a los venezolanos a “realizar viajes irregulares”.
Colombia – como el mayor país receptor – ha tomado medidas para regular a los venezolanos en su territorio. No ha impuesto ningún tipo de documento adicional para los venezolanos, acepta los pasaportes vencidos hasta por cinco años y recientemente regularizó a unos 24.000 niños de madre o padre venezolano que no tenían nacionalidad.
En el ámbito regional, se acordó la instauración de una tarjeta única de vacunación a partir de octubre para los migrantes venezolanos.
El representante especial aprovechó para apelar a la comunidad internacional, agencias de cooperación internacional e instituciones financieras “para que refuercen su apoyo, incluyendo el financiero, a la población venezolana, así como a los países de acogida y las comunidades locales que albergan a las personas venezolanas”.
En recientes declaraciones a los medios, el canciller colombiano Carlos Holmes Trujillo, junto a Stein, detalló que falta un 70% de lo solicitado por las Naciones Unidas en ayuda para los refugiados y migrantes, indicando que para inicios de agosto, recibieron 96 de los 315 millones de dólares que la ONU solicitó para este año.
Por su parte, David Smolanky, coordinador del grupo de trabajo para migrantes venezolanos de la OEA, indicó con anterioridad que esos 4,3 millones de migrantes personas es superior al total de la población de Uruguay o Panamá.
“Jamás se había visto algo así en la región y las restricciones migratorias a través de exigencias de visas no resolverán el problema”, agregó.
Con información de La Voz de América