La ciudad de Moscú volvió a flexibilizar el miércoles algunas restricciones impuestas durante meses para frenar la pandemia de coronavirus, tras registrar una reducción del número de infecciones pese a que no ha habido confinamiento.
«La pandemia retrocede y en estas circunstancias nuestro deber es crear las condiciones para reactivar la economía», anunció el alcalde de la capital rusa, Serguéi Sobianin.
Bares, restaurantes y discotecas podrán permanecer abiertos después de las 11:00p.m. y el teletrabajo para al menos 30% de las personas ya no es obligatorio.
El decreto de Sobianin no incluye la autorización de manifestaciones públicas en un momento en que los partidarios del opositor encarcelado Alexéi Navalni organizaron una nueva jornada de protestas el próximo fin de semana, por segunda semana consecutiva.
Estas concentraciones, consideradas ilegales, provocaron el pasado sábado 1.500 arrestos en Moscú y otros 4.000 en diversas partes de Rusia. Sobianin calificó la manifestación celebrada en la capital de «inaceptable», debido a la pandemia. Desde el punto de vista sanitario, la situación en Moscú, donde viven 12 millones de personas, está mejorando.
«Más del 50% de las camas de las unidades covid están libres, algo que no sucedía desde mediados de junio», dijo.
El martes, se registraron en Moscú 2.317 nuevos casos.
Las autoridades rusas no decretaron un confinamiento general pese al recrudecimiento de los casos, con el fin de proteger una economía ya debilitada.
El Kremlin cuenta con la campaña de vacunación en curso para frenar la pandemia. Según cifras oficiales, Rusia ha registrado desde el inicio de la pandemia 3,75 millones de casos de coronavirus y más de 70.000 muertes.
rco/alf/lch/bl/es
© Agence France-Presse