La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) pidieron a países de América Latina y el Caribe ampliar los procesos de regularización de los migrantes y refugiados.
«Millones de personas refugiadas y migrantes de Venezuela, por ejemplo, se han beneficiado de los procesos de regularización en diversos países de América Latina y el Caribe», indicaron en una declaración conjunta.
Por lo tanto, consideraron «esencial» extender iniciativas como esta a personas de otras nacionalidades, ayudar a proteger sus derechos humanos, y brindar estabilidad y soluciones a quienes de otra manera podrían encontrarse «en situación de movilidad humana».
A su parecer, los actores del desarrollo y las instituciones financieras internacionales desempeñan un papel de suma importancia.
«Sus contribuciones, que incluyen financiamientos y préstamos para el desarrollo de infraestructura esencial y necesaria, ayudan a fortalecer los servicios nacionales, incluso en favor de las comunidades de acogida, permitiéndoles superar la eventual sobresaturación por la demanda adicional que supone la llegada de personas refugiadas y migrantes», añadieron en el comunicado.
Por último, sostuvieron que los desafíos que supone la movilidad humana en las Américas requieren «de una estrategia hemisférica coordinada» que se base en la solidaridad y la cooperación internacional, según se precisa en la Declaración de los Ángeles.