Las altas temperaturas producto del cambio climático parece que no van a cesar, sino que cada vez serán más intensas. El jueves, por tercera vez en la semana, la Tierra registró un récord de temperatura: 17,23 grados Celsius (63 grados Fahrenheit).
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Quizás no parece tan caliente porque promedia las temperaturas de todo el mundo, pero esa temperatura ya ha sido calificada como la más calurosa jamás registrada y según un destacado científico, podría ser la de calor más extremo en 120.000 años, reseñó Infobae.
Las personas que se exponen a altas temperaturas por tiempo prolongado pueden sufrir mareos, confusión, náuseas, sudoración excesiva y sed extrema, además de agotamiento e insolación.
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Incluso, no es necesario estar directamente bajo el sol para sufrir los efectos de un golpe de calor. La humedad, especialmente en lugares sin acceso a aires acondicionados, también pueden causar malestar.
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-¿CÓMO PROTEGERSE DEL CALOR?
- Beber agua con electrolitos o bebidas deportivas que contengan minerales para compensar las sales perdidas al sudar.
- Permanecer en la sombra tanto como sea posible.
- Si está afuera, puede humedecer su cuerpo con agua fría que permita el enfriamiento a través de la evaporación, o incluso, poner una toalla mojada en el cuello.
- Usar ropa liviana u holgada adecuada, permanecer dentro en un ambiente fresco, evitar actividades extenuantes y mantenerse bien hidratado”, indicó a la VOA Julia Turner-Shanus, profesional de enfermería en ChristianaCare.
Con información de VOA | Infobae.