Rusia acordó un alto el fuego parcial en sectores energéticos e infraestructurales de Ucrania, como parte de una iniciativa impulsada por Estados Unidos para frenar la invasión rusa, según confirmó este martes la Casa Blanca.
Sin embargo, el Kremlin condicionó el avance hacia un acuerdo más amplio con una serie de exigencias adicionales.
Readout of President Donald J. Trump’s Call with President Vladimir Putin:
Today, President Trump and President Putin spoke about the need for peace and a ceasefire in the Ukraine war. Both leaders agreed this conflict needs to end with a lasting peace. They also stressed the…
— Karoline Leavitt (@PressSec) March 18, 2025
El anuncio se produjo tras una conversación telefónica de 90 minutos entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y su homólogo ruso, Vladimir Putin. En un comunicado, la Casa Blanca informó que ambas naciones iniciarán «negociaciones técnicas» para un alto el fuego marítimo en el mar Negro y trabajarán hacia un cese total de las hostilidades.
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El Kremlin pidió la implementación de mecanismos de control efectivos sobre la línea de conflicto, el cese de la movilización de ciudadanos ucranianos y el fin del rearme de las fuerzas armadas de Ucrania.
También solicitó la suspensión total del apoyo militar extranjero a Ucrania, incluyendo el envío de armas y asistencia en inteligencia.
A pesar de estas condiciones, Putin ordenó cumplir con el alto el fuego en infraestructuras energéticas durante los próximos 30 días. Moscú afirmó que el mandatario respondió «constructivamente» a la propuesta de un cese de hostilidades en el mar Negro, aunque las negociaciones sobre este punto aún están en curso.
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Durante la llamada, Putin también comunicó a Trump un acuerdo para el intercambio de 175 prisioneros de guerra de cada bando entre Rusia y Ucrania, así como la liberación de 23 soldados ucranianos gravemente heridos como «gesto de buena voluntad».