El presidente Joe Biden retirará todas las tropas estadounidenses de Afganistán durante los próximos meses, informaron personas familiarizadas con los planes citadas por Reuters y el Washington Post, completando la salida militar para el vigésimo aniversario de los ataques del 11 de septiembre de 2001 que llevaron a Estados Unidos a su guerra más larga.
La decisión, que se espera que Biden anuncie el miércoles, mantendrá a miles de fuerzas estadounidenses en el país más allá de la fecha límite de salida del 1 de mayo que la administración Trump negoció el año pasado con los talibanes, según una persona familiarizada con el asunto, que al igual que otros que hablaron bajo condición de anonimato para describir planes que aún no son públicos.
Sin embargo, la retirada se basaría en ciertas garantías de seguridad y derechos humanos, dijeron las fuentes.
Se espera que el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, informen el miércoles sobre la decisión a los aliados de la OTAN en Bruselas. Biden también puede anunciar públicamente su decisión, dijeron las fuentes.
La decisión de Biden, en caso de ser confirmada, no cumpliría con la fecha límite del 1 de mayo para la retirada acordada con los insurgentes talibanes por la administración de su predecesor, Donald Trump.
En un comunicado el mes pasado, los talibanes amenazaron con reanudar las hostilidades contra las tropas extranjeras en Afganistán si no cumplían con la fecha límite del 1 de mayo. Pero aún establecería una fecha a corto plazo con la retirada, lo que podría disipar las preocupaciones de los talibanes de que Biden prolongaría el proceso.
La fecha límite del 1 de mayo ya había comenzado a parecer cada vez menos probable en las últimas semanas, dada la falta de preparativos sobre el terreno para garantizar que se pudiera hacer de una manera segura y responsable.
Los funcionarios estadounidenses también han culpado a los talibanes por no cumplir con los compromisos de reducir la violencia y algunos han advertido sobre los vínculos persistentes de los talibanes con Al-Qaeda. Fueron esos vínculos los que desencadenaron la intervención militar estadounidense en 2001 tras los ataques de Al-Qaeda el 11 de septiembre en Nueva York y Washington porque los talibanes habían albergado a líderes de Al-Qaeda. Miles de soldados estadounidenses y aliados han muerto en combates en Afganistán.
Oficialmente, hay 2.500 soldados estadounidenses en Afganistán, aunque el número fluctúa y actualmente es de unos 1.000 más que eso. También hay hasta 7.000 fuerzas extranjeras adicionales en la coalición allí, la mayoría de ellas tropas de la OTAN.
Con información de Voz De América