ORLANDO VIERA-BLANCO
El Acuerdo de Barbados entre la plataforma unitaria [oposición política] y el régimen de Caracas encabezado, comporta un acopio de derechos políticos y civiles de los venezolanos que, por cierto, es justo alertar, no deberían ser objeto de negociación. Una proclamación de cumplimiento de deberes constitucionales que han sido sistemáticamente conculcados en miras de elecciones libres, verificables, competitivas y justas.
El acuerdo contempla dos capítulos. Un Acuerdo parcial sobre la promoción de derechos políticos y garantías electorales para el pueblo venezolano, donde se establecen lineamientos basados en el respeto a la Constitución y las leyes de la República. Y un Acuerdo Parcial “por la protección de los intereses vitales de la Nación, levantamiento de las sanciones y el respeto a la autodeterminación y soberanía de Venezuela”.
Un clima de tolerancia política
La promoción de Derechos Políticos y Garantías Electorales para todos, donde “las partes reconocen y respetan el derecho de cada actor político a seleccionar a su candidato para las elecciones presidenciales de manera libre y conforme a sus mecanismos internos, atendiendo a lo establecido en la Constitución y la ley”, es una máxima que debe interpretarse como el derecho a elegir a los candidatos de su preferencia sin que medien inhabilitaciones írritas e inconstitucionales. El pacto no lo menciona directamente, pero es lo que se desprende de la frase “el derecho de cada actor político a seleccionar a su candidato para las elecciones presidenciales de manera libre y conforme a sus mecanismos internos.”
Al momento de escribir estas líneas no se había celebrado la elección primaria. Pero en caso de resultar vencedor un inhabilitado[a] político, su deber es comenzar un proceso eficaz, cercano, de buena comunicación con Washington, con la plataforma Unitaria y los partidos políticos. Jugar a caída y mesa limpia sería una aproximación suma cero sin rendimiento. El reto no es sólo habilitar al candidato[a] ganador[a] elegido, sino también a los partidos políticos [judicializados], que son base fundamental de organización y vigilancia del voto en las presidenciales.
El acuerdo no es un pacto resolutorio. Es un mapa de ruta, un avance positivo, un proveedor de tolerancia política, donde no toca responder con actitudes excluyentes. La inhabilitación es un abuso político y antijurídico cuya anulación depende de la voluntad de la coalición dominante, no de un poder judicial imparcial que no tenemos. Eso se tramita con persuasión y acompañamiento [interno e internacional] del elegido [a] inhabilitado[a]. El acuerdo de Bridgetown es una declaración de ‘buena conducta’ que en el camino logrará [o no] concreción. Por ello-habida cuenta de la primaria-es momento de abrir el compás, consolidar consensos y alianzas en búsqueda de la unidad nacional, la reaglutinación de fuerzas y la redención política.
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Las partes acordaron promover ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) “garantías electorales, entre ellas proponer que las presidenciales se realicen en el segundo semestre del 2024; la ejecución de la actualización del Registro Electoral Permanente, incluyendo jornadas de actualización e inscripción en el país y en el extranjero, la depuración del REP y la ejecución de operativos especiales de cedulación, entre otros”. Este es uno de los aspectos más importantes del acuerdo, porque señala de manera expresa que el evento presidencial [2024] debe ser auditado, depurado y rendidor de cuentas, antes, durante y después…
Es verdad que no hay mención certera sobre inhabilitaciones, desjudicialización de partidos, liberación de presos políticos, desactivación de ‘puerta rotatoria’, despenalización de perseguidos políticos, medidas cautelares y sometimiento a juicios parcializados e injustos. No podía contemplarlo. Era imponer al régimen a un costo inadmisible. Entonces eligieron decir: “[…] se promoverá la autorización a todos los candidatos presidenciales y partidos políticos, siempre que cumplan con los requisitos establecidos para participar en la elección presidencial, consistentes con los procedimientos establecidos en la ley venezolana; asimismo conforme a los principios de celeridad, eficiencia y eficacia recogidos en la Constitución».
El desafío entonces es de los ciudadanos, acompañado de condicionamientos determinantes establecidos por el Secretario de Estado Anthony Blinken y de Brian Nichols, Subsecretario para el Hemisferio Occidental, según los cuales las licencias podrían suspenderse si Maduro no cumple con los acuerdos, incluído habilitar candidatos de oposición…El facilitador por parte del Reino de Noruega, Dag Nylander destacó “la voluntad demostrada por las dos partes, en las últimas semanas y aseguró que “es muestra de lo que se puede lograr cuando todos se unen por el bienestar del pueblo”. Anunció además que “la mesa de diálogo y negociación entre el Gobierno Bolivariano de Venezuela y la Plataforma Unitaria han demostrado avances significativos en temas esenciales, aunque falta mucho por hacer”.
Qué es lo que falta por hacer…
Una de las consecuencias más sensibles y destacadas del Acuerdo de Barbados, ha sido el inicio de liberación de los presos políticos. La Mesa de Negociación de México no priorizó como agenda este capítulo fundamental de los DDHH. Una lección aprendida tanto para mediadores como para los representantes de la plataforma unitaria. Ahora queda lograr la libertad de todos los presos políticos, pero, además la suspensión de procesos amañados, sometimientos a juicios, prohibición de salidas del país, órdenes de captura, en fin, actos de criminalización de la justicia y de “puerta rotatoria’, que deben cesar.
También se firmó un acuerdo parcial “para la Protección de los Intereses Vitales de la Nación”, que se refiere a la ratificación de los derechos históricos de Venezuela sobre el territorio Esequibo y el rechazo a las acciones “unilaterales” de Guyana, “en contravención del Derecho Internacional, relacionadas con el otorgamiento de concesiones de exploración y explotación energética en áreas marinas y submarinas pendientes de delimitar entre los dos Estados”. Se trata de un llamado a la defensa histórica, jurídica y diplomática de nuestro territorio, lo cual demanda un esfuerzo unitario institucional urgente e impostergable.
Otro si: “[…] Defender los bienes y la propiedad de Citgo Petroleum Corporation para preservar los intereses vitales y el patrimonio del pueblo venezolano, así como hacer esfuerzos para preservar los activos del país en el exterior”. Así el régimen debe allanarse de una práctica criminógena contra quienes han venido dirigiendo a CITGO en el marco del Gobierno Interino de Juan Guaidó. Convertir los juicios ante Corte Norteamericanas en persecución política, es desviar los esfuerzos en defensa de la corporación…siendo, por cierto, una de las principales misiones de quien resulte ganador[a] en la primaria, defender a CITGO en EEUU, por todos los medios y sin mezquindades.
Presos políticos, sanciones y otros…
Prueba elocuente de la máxima “a confesión de parte relevo de prueba” es la liberación de presos políticos. Por años no hubo juicio, ni debido proceso, ni valoración probatoria. Pero venezolanos inocentes han sido sometidos a la justicia de Miraflores. Ahora de un plumazo, ponen en libertad a algunos de ellos. Queda claro que la justicia es revolucionaria…
Entonces no hay vencidos ni vencedores. El Acuerdo de Barbados supone un avance importante en el inventario político para lograr una transición negociada hacia la democracia. Queda un sinsabor en el paladar: Se han dado licencias para volver a administrar recursos, petróleo, gas, oro, sin rendir cuentas. Otra prueba que la política [Maquiavelo] “no tiene relación con la moral”, pero que no por amoral, se paga muy caro…
Al decir del jurista Fernando Fernández, “no confundir levantar sanciones con otorgar licencias. El levantamiento es definitivo y la licencia es temporal, restrictiva y revocable. Es un permiso dentro del programa de sanciones. Las cuales no han sido derogadas ni eliminadas”. Esta aclaratoria es importante por cuanto EE. UU. no levantó las sanciones sino otorgó autorizaciones sectoriales de intercambio de negocios y pago de obligaciones a empresas del estado venezolano. Si en el transcurso de dichas licencias no se cumplen los acuerdos, entonces serían suspendidas.
La retórica fue un elemento característico del acuerdo. Pero no podía suscribirse de otra manera. Considerandos que hacen un llamado continuo “al respeto de la ley y la constitución” cuyo quebrantamiento es un adiós a las licencias…Tampoco confundir liberación progresiva de recursos fiduciarios [ONU] con disposición plena. El fondo constituido a través de la ONU supone observancia y rendición de cuentas. Pensionados, programas escolares, mejoramiento salarial de maestros, obreros, personal de salud; programas alimentarios, dotación de medicinas, mejoramiento de sistemas de suministro de agua y luz, también están contemplados…
Después de la primaria, ahora qué
La verdadera cuenta regresiva comienza después del 22 de octubre de 2023. Todo indica que María Corina Machado ganará el evento. A partir de esta fecha, asumiendo una primaria concurrida, se abre un nuevo capítulo en el proceso de legitimación de un nuevo liderazgo opositor.
De la primaria no saldrá “un nuevo jefe opositor”. Esa visión mesiánica no es buena. Surgirá una gran oportunidad política de reagrupación, reunificación y recomposición de fuerzas y estrategias. El primer reto, lograr la habilitación. Ello requiere moderar el discurso, elevar el costo político al régimen, optimizar las alianzas internas e internacionales, y asegurar una disidencia activa.
Nota final: Escribo esta nota final a horas de culminar la primaria. Quiero elevar nuestro sincero reconocimiento a todos los voluntarios del evento. A la Comisión Nacional de Primaria y al Dr. Jesús María Casal, por su gran determinación y firmeza. Al pueblo bueno y demócrata de Venezuela que bajó de todos los rincones y votó contra todo pronóstico y adversidad, abonando el camino para una nueva era de paz, luz y libertad.
Deseo felicitar sinceramente a María Corina Machado. He sido testigo de sus aciertos y errores. Caídas y ascensos con propósito de enmienda. Ahora Dios y la patria la premian con amor y preferencia. Voto de confianza [93%] de un pueblo noble que otorga un claro mandato de poder pero que demanda unidad sin acritud, con afecto y humildad para superar los grandes retos porvenir…
Enhorabuena Maria Corina… Comienza otro camino, el principio de un buen final…