Aunque con una exitosa carrera a Clayton Kershaw le faltaban dos de los logros más satisfactorios de la vida de cualquier beisbolista: una victoria bien entrada la Serie Mundial y un anillo de campeonato y ya casi tiene ambos.
Este domingo, subió a la lomita con los Dodgers de Los Ángeles y logró redireccionar a su equipo con una dura labor que incluyó un lanzamiento al plato que será recordado durante mucho tiempo.
A los Dodgers les falta un triunfo más, para alzarse con el primer título desde 1988.
Kershaw derrotó a los Rays por segunda vez en seis días, saliendo de apuros en el cuarto inning con un tiro de rápida reacción para evitar un inusual robo del plato, y los Dodgers de Los Ángeles resistieron para apuntarse una victoria de 4-2 sobre Tampa Bay que les dio una ventaja de 3-2 en la Serie Mundial.