La Asamblea Nacional (AN) legítima respaldó la lucha de los educadores y trabajadores, en su reclamo, ante la precaria situación laboral que viven.
«Se apoyará de manera irrestricta a los educadores y docentes en general, a la par de trabajar por un verdadero cambio en Venezuela a través de elecciones libres para tener un país de oportunidades y progreso y así poder recuperar el poder adquisitivo de los trabajadores», indicó.
El diputado José Mendoza expresó durante su intervención que, el sueldo «no alcanza ni siquiera para que nuestros educadores puedan trasladarse a los centros educativos, es por eso que hoy vemos a nuestros docentes desertando y dedicándose a otras actividades económicas».
Para Mendoza es una humillación y una tragedia lo que viven los educadores porque no pueden cubrir la canasta básica con ese «salario de hambre» e inexistente.
Entretanto la diputada Ana Mercedes Aponte señaló que el magisterio lleva 12 días en las calles del país protestando para que se firme la tercera a convención colectiva».
«Los docentes del país atraviesan la peor crisis humanitaria jamas vivida en la historia. El Estado vulnera sistemática sus derechos consagrados en la Construcción y Ley Orgánica de Trabajo y de Educación», aseveró.
El parlamentario Luis Barragán indicó que «tanto el salario de los docentes como otros aspectos fundamentales están distorsionados» y por ello reiteró que desde el Parlamento reconocen y apoyan está protesta social surgida desde las mismas bases del gremio educativo venezolano.
La presidenta del legítimo Parlamento Dinorah Figuera aseguró que «mientras se está en una diatriba política», los educadores venezolanos no tienen cómo comer. «Nosotros tenemos que ir encaminados hacia la representatividad de las verdaderas necesidades del pueblo a través de su legítimo Parlamento», manifestó.
Figuera recordó que «hoy existe un estudiante que no tiene pasaje para ir a su escuela» y por eso, el Parlamento con fuerza, con rigor y con responsabilidad; debe asumir las riendas y acompañar al movimiento de los educadores en su justo reclamo.
A su parecer, también deben unir a otras fuerzas, gremiales, institucionales sociales y políticas a esta lucha, y repudió las amenazas de los grupos para policiales del régimen hacia los educadores y trabajadores.