En una reciente revelación del Ministerio de la Defensa, se dio a conocer una lista de 33 militares que fueron expulsados y degradados de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB). Sin embargo, surge una interrogante significativa, ya que ocho de estos nombres formaban parte de una lista de 302 oficiales que fueron separados de la FANB en julio de 2020 por medidas disciplinarias, según lo informado por el General en Jefe Vladimir Padrino López.
Los nombres que generan perplejidad al repetirse en ambas listas son los siguientes: coronel José Alberto García Cárdenas; tenientes coroneles Juan Antonio Hurtado Campos, José Luis Payema, César Ramón Matos Sucre; mayores Mary Yelizza Ramírez Urbina, Richard Leonardo Luengo Valbuena, Eduardo Antonio Galué Segovia y Jorge Enrique García Rojas. Se suma a ellos el nombre del Mayor Luis Eduardo González Pin, quien para 2020 ya había desertado.
Resulta llamativo que estos oficiales, que ya habían sido separados de la institución en 2020, vuelvan a aparecer en la lista de 2024. ¿Se están reciclando estos nombres para inflar una lista de posibles conspiradores?
Cabe destacar que la situación se complica aún más con la inclusión del coronel Carlos Jesús Sánchez Vásquez, quien había solicitado su baja en octubre de 2023 y fue arrestado en diciembre del mismo año, así como el caso de su esposa, la teniente Karen Nayarit Gómez Gutiérrez, detenida después de reclamar ante diversas instancias.
Esta situación plantea interrogantes sobre la transparencia y consistencia en las medidas disciplinarias dentro de la FANB, generando incertidumbre en torno a la veracidad de la reciente lista de expulsados. Las autoridades deben abordar estas preocupaciones para mantener la confianza en el proceso disciplinario y la integridad de la información proporcionada.
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