La Conferencia Episcopal Venezolana, deploró este viernes la detención de monseñor Rolando José Álvarez, en Nicaragua por parte de la dictadura de Daniel Ortega, por lo que exigió respeto e integridad de los derechos humanos, además expresó su preocupación ante los acontecimientos “a la hermana Iglesia en Nicaragua”.
En un comunicado indicaron que han “seguido con atención y preocupación los acontecimientos que han afectado a la hermana Iglesia en Nicaragua,” por lo que han orado “por la pacífica superación de la situación de inquietud y tensión generada por el cierre de medios de comunicación, salida de religiosas, suspensión de actividades eclesiales, detención de sacerdotes y una actitud permanente de enfrentamiento con algunos miembros del episcopado.”
Asimismo, afirmaron que la situación en la nación centroamericana “se ha ido agravando hasta llegar al desalojo por parte de los organismos del Estado”, estos acontecimientos aseguraron son “una actitud hostil hacia la Iglesia católica” y al estado de derecho.
La Conferencia Episcopal venezolana exigió a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo “respeto de la vida, integridad y salud de todos los obispos, sacerdotes, diáconos, religiosos y religiosas, agentes de pastoral laicos”.
