El régimen venezolano acusó este viernes a la Organización de Naciones Unidas de buscar «declinar su responsabilidad» en el aumento de las tensiones con Guyana, durante las últimas semanas por la disputa territorial que mantienen ambos países desde hace más de un siglo.
«Venezuela rechaza las declaraciones atribuidas al Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas, António Guterres, a través de las cuales pretende declinar su responsabilidad en las tensiones generadas por Guyana, relacionadas con la controversia territorial por la Guayana Esequiba», dijo en un comunicado la Cancillería chavista.
El pronunciamiento responde a un comunicado del portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, en el que expresa que el secretario general está siguiendo «con preocupación la reciente escalada de tensión» entre los países por la controversia fronteriza.
En el texto, la ONU, que fue por años intermediaria en el conflicto entre ambos países, recuerda que el caso está ahora en manos de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), y señala que «confía en la buena fe de ambas partes para impedir cualquier acción que agrave o prolongue la controversia».
El pasado septiembre, Guyana anunció una ronda de licitación de bloques petrolíferos en la región del Esequibo, el territorio en disputa que tiene cerca de 160.000 kilómetros cuadrados, y que actualmente administra Guyana (125.000 habitantes de 800.000 guyaneses en 2012). Es rico en minerales, petróleo y una amplia biodiversidad.
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El régimen protestó por las licitaciones y la situación ha desencadenado un intercambio de mensajes diplomáticos en los que ambos países se acusan de crear provocaciones.
La dictadura convocó entonces un referendo consultivo para el 3 de diciembre proponiendo anexarse el territorio y otorgar nacionalidad a los habitantes.
Guyana rechazó la consulta convocada por Venezuela y pidió a la CIJ detener el referendo. La corte convocó a una audiencia para el próximo martes, pero el Estado dictatorial sostiene que rechaza esta instancia para la resolución del conflicto y apela a la negociación.
Guyana defiende que las aguas que reclama Venezuela le pertenecen debido a que así fue acordado en un laudo arbitral en París en 1899, pero Venezuela lo rechaza y reivindica un tratado que fue firmado en Ginebra en 1966 con Reino Unido antes de la independencia guyanesa y que establecía bases para una solución negociada y desconocía el tratado anterior.
AFP