Hasta la sangre se convierte en un negocio en Venezuela y es que un litro de plasma se vende entre 60 y 150 dólares en el mercado negro de Anzoátegui, debido a la paralización de los bancos especializados en la red de salud pública.
Quiénes necesitan transfusiones de emergencia pueden morir esperando. En el país no existen donantes de sangre, solo el uno por ciento de las personas lo hace de forma voluntaria, según estimaciones médicas.
Es un índice que engloba la inoperatividad de los bancos, el riesgo que corren los pacientes que necesitan transfusiones y el veto no escrito, que excluye a varones homosexuales en estas listas.
Aunque la ley sobre transfusiones y bancos de sangre no lo prohíbe en la práctica, los centros de salud descalifican a los homosexuales, a veces solo por su apariencia, incluso si el hospital tiene sus reservas en cero.
De esta forma, un país sumergido en una crisis humanitaria conmemora el Día Mundial del Donante de Sangre.
En Venezuela mientras más raro es el tipo de sangre, más caro sale obtenerla, destacó el periodista Jesús Albino.
La cifra de donantes de sangre voluntarios en Venezuela disminuyó en un 82% entre el 2018 y 2021, lo que se traduce en que apenas el 3.12% de los donantes aceptados en los bancos de sangre del país fueron voluntarios.