Luis Parra, quien sueña con ser Presidente de la Asamblea Nacional, comenzó la cacería de brujas con los trabajadores del parlamento a quien ha pedido pongan su cargo a disposición por ser «personal de confianza» del Presidente Juan Guaidó.
En una comunicación de la Presidencia paralela Parra comunica a los empleados de cargos directivos que serán sustituidos para «continuar con la operatividad» del poder legislativo.